• Vehículos Toyota presentan riesgos de incendio en sistemas de cableados del motor.

• Camionetas Ford podrían generar incendios en el sistema de cinturones de seguridad

• Autos Volkswagen, Fiat Chrysler, y BMW también han mostrado riesgos de accidentes.

Si bien no es nuevo el hecho de que diferentes marcas armadoras de automóviles llamen a sus dueños para revisar ciertos modelos por fallas específicas en su fabricación, lo cierto es que recientemente se ha registrado esta situación con mayor frecuencia. Ahora son Ford y Toyota quienes han anunciado que se deben revisar miles de vehículos.

Por parte de la armadora japonesa Toyota, se trata de los modelos Prius Híbrido, Prius Híbrido Recargable y el 4×4 C-HR Híbrido, fabricados entre 2015 y 2016, de los cuales, 554 mil se comercializaron en Japón,  217 mil en América del Norte y 219 mil en Europa.

La razón para el llamado a revisión se encuentra en los cables del motor, que con el uso puede llenar de polvo, desgastar, dejarlos sueltos y caer en el riesgo de provocar incendios.

Por parte de Ford, se trata de las camionetas y camiones ligeros F-150 2015-18 modelos Regular Cab y SuperCrew Cab, de los cuales más de un millón se vendieron en Estados Unidos, 340 mil en Canadá  y 37 mil en México.

La razón es tam ién por riesgo de incendio por causa de un defecto en los pretensores de los cinturones de seguridad en los asientos delanteros que podrían provocar un incendio al generar demasiadas chispas durante un colapso.

Desde hace tiempo se ha venido presentando esta situación con diferentes marcas de vehículos alrededor del mundo: las firmas automotrices descubren que durante su proceso de fabricación, los vehículos tuvieron algunas deficiencias que les obliga a contactar a los dueños y usuarios de los autos para corregir los daños y riesgos por su manejo.

En agosto pasado, Volkswagen también anunciaba de riesgos de incendio de 700 mil modelos Tiguan y Touran -lee más detalles en esta liga-, mietras que en 2016 se anunció el riesgo para vehículos BMW por riesgos en sus bolsas de aire.

Por su parte, también Fiat Chrysler llamó en semanas recientes a revisar el sistema de frenos de autos como Jeep Cherokee y Gran Caravan, entre otros.

Si bien la acción representa para las marcas una especie de control de daños ante riesgos futuros, la imagen de las armadoras se puede ver afectada por causa de este tipo de errores de fabricación que pueden generar desconfianza en el comprador y una merma en el prestigio y proyección de las marcas que comercializan y fabrican los vehículos.