Una de las intervenciones de salud pública más costoefectivas son las vacunas, además de salvar vidas y ser una gran inversión para la salud pública y el desarrollo social, la vacunación también es un derecho humano indiscutible.
Las vacunas son importantes en todas las etapas de la vida y los esquemas de vacunación para cada grupo de edad en México son de los más completos, ya que previenen enfermedades como la tuberculosis, el sarampión, la influenza, y por supuesto, la hepatitis.
Sin embargo, actualmente la cobertura de vacunación en México se encuentra en un punto crítico, apenas 18.5 % de niñas y niños menores de 1 año de edad cuentan con su esquema completo. Miles de niñas y niños menores de 5 años mueren cada año por enfermedades que se pudieron haber prevenido con vacunas que ya existen.
Según cifras de la ENSANUT (Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2022), la cobertura para Hepatitis B es de las más bajas a nivel nacional, con una cobertura de 65.1 % para menores de 1 año; la región con mayor rezago es la centro, con 41 % seguido de la región Península, con 49.4 %. En adolescentes de 10 a 19 años fue de 29.4 % en hombres y 34.3 % en mujeres. La región más desprotegida es la centro-norte con 23.4 %. Además, pertenecer a zonas rurales disminuye la cobertura (27.4 %)
Entre las razones por las que las coberturas son tan bajas, destacan el abasto irregular de vacunas, las falsas contraindicaciones, mitos y creencias, la falta de un sistema nominal de seguimiento a la vacunación, el uso de los indicadores actuales que no permiten la identificación de rezagos o las oportunidades para completar esquemas, los problemas de infraestructura, así como la falta de transparencia en el proceso de compras de insumos.
Los graves rezagos de vacunación ponen en peligro la salud y supervivencia de las infancias y se corre el riesgo de que en el país se presenten brotes de enfermedades como la hepatitis, que amenazan a la salud pública, el desarrollo económico y social y la seguridad nacional.
Por eso, desde Save the Children, y en el marco del Día Mundial contra la Hepatitis, impulsamos la recuperación de coberturas, la mejora en la distribución de un presupuesto suficiente y transparente, el fortalecimiento de la red de frío y la creación de un registro de información con información nominal. Para este año queremos actualizar el diagnóstico situacional y elaborar una agenda de prioridades de la que se desprendan recomendaciones que se transmitan por los canales de comunicación y formen parte de los compromisos de los candidatos presidenciales.
Cuando las niñas y niños reciben sus vacunas, tienen mayores probabilidades de sobrevivir en sus primeros años de vida, crecer y desarrollarse sanos. Hoy, más que nunca, las vacunas deben ser una prioridad.