Uno de los grandes activos de Tesla sin duda es su propio CEO, Elon Musk. El empresario ha logrado construir una marca sólida alrededor de su persona, situación que no sólo sirve como una gran estrategia de promoción para sus marcas existentes, sino que además parece ser garantía par cualquier nueva propuesta comercial que provenga del reconocido líder empresarial.
El año pasado lo demostró con The Boring Company, la compañía detrás de su idea de construir una red de túneles en la que los vehículos de Los Ángeles serían transportados en plataformas a altísima velocidad, evitando el tráfico y llegando a puntos de salida en los que se vuelve a conducir.
En honor a ella lanzó gorras, que en tiempo récord lograron ventas por 300 mil dólares. Así es como la confianza de vender cualquier cosa se ha apoderado de él.
Con esto en mente, el cofundador de PayPal ha indicado que su próximo “gran negocio” podría ser una fábrica de dulces. Así lo refirió en dos ocasiones desde su cuenta de oficina de Twitter, en donde especificó “estoy comenzando una compañía de dulces y va a ser increíble”.
I am super super serious
— Elon Musk (@elonmusk) 5 de mayo de 2018
Los mensajes tuvieron todo tipo de reacciones entre los seguidores, en donde más de una persona se imaginó un mundo nuevo en la industria de los caramelos con toda la creatividad que caracteriza la innovación de Musk.
No obstante, estas declaraciones no fueron más que parte de la contestación del director ejecutivo de Tesla a Warren Buffet, dueño de Berkshire Hathaway, (compañía propietaria de varias marcas entre las que se encuentran Heinz, Geico o See’s Candies), empresario que en días pasados hizo referencia a uso luego de que éste criticara uno de los principios de inversión de Buffet: el llamado ‘economic moat’, ventaja competitiva sostenible de una empresa.
Elon catalogó a esta estrategia como “débil” al tiempo que indicó que el poder y ritmo de innovación era mucho más importante para cualquier compañía. La respuesta de Buffet llegó rápido ak mencionar que “Elon puede atreverse con algo novedoso en algunas áreas. No creo que quiera ir tras nosotros en (el negocio de) los dulces”.
Saying you like “moats” is just a nice way of saying you like oligopolies
— Elon Musk (@elonmusk) 6 de mayo de 2018
Para Musk la mejor manera de plantar postura al respecto fue Twitter desde donde, luego de compartir un video de la película animada Trolls indicó que construiría un imperio para el mercado de los dulces para “Luego voy a construir un ‘moat’ y llenarlo de dulces. ¡Warren B no podrá resistir la inversión! Kryptonita de Berkshire Hathaway”.
Más allá de las protestas de Musk por incursionar en el mundo de los dulces y caramelos, lo cierto es que fijar posturas a través de redes sociales se ha convertido en una interesante estrategia de branding personal para el directivo que, cada vez, se hace más evidente.
Es interesante reconocer que Musk tiene claro que no todas las batallas se deben pelear y ha elegido sumarse sólo a aquellas que, de alguna manera, pueden sumar valor tanto a su negocio como a la fuerza de su imagen. Recordemos su postura en el caso de Facebook o bien el teama de los aranceles con Trump.
