Las principales ligas deportivas de Estados Unidos, como la NBA, MLB y NFL, tienen juegos de estrellas, pero históricamente el que es considerado el peor es el de futbol americano, conocido como el Pro Bowl. Te decimos algunas de las razones por las que este evento deportivo no llama la atención como el Super Bowl.

De acuerdo con datos de Nielsen y Statista en 2008 el Pro Bowl tuvo una audiencia de 47 millones de personas y en 2015 fue de 46.3 millones, lo que significa que el evento no consigue nuevos espectadores con el paso de los años.

Aunque es una audiencia considerable, está lejos de los 115 millones de televidentes que tuvo el Super Bowl de 2015, en el que los Patriots le ganaron a los Seahawks y donde Katy Perry estuvo en el espectáculo de medio tiempo.

Históricamente el Pro Bowl ha despertado poco interés entre los fans de la NFL y la liga ha hecho esfuerzos por convertir el evento en algo más atractivo. Antes se jugaba una semana después del Super Bowl y desde 2010 se realiza un domingo antes, en busca de captar un poco de la emoción previa al gran juego.

Otro cambio significativo es que durante décadas los equipos eran la Conferencia Americana contra la Conferencia Nacional, pero ahora la NFL mezcla a los jugadores de ambas conferencias en equipos que llevan el nombre de leyendas del futbol americano. En 2016 es Team Irvin contra Team Rice, en homenaje a los jugadores retirados Michal Irvin y Jerry Rice.

La mayoría de las ocasiones, en las últimas décadas, el Pro Bowl se ha jugado en un estadio en Hawaii, pero el año pasado se realizó en el estadio de Phoenix, donde también se jugó el Super Bowl. Este 2016 el partido regresó a la isla estadounidense.

Otro factor que influye en el poco interés en el Pro Bowl es que ni a los jugadores de la NFL les importa. Al ser de participación voluntaria, (los convocados salen de una votación), muchas estrellas se niegan a acudir a este partido porque lo consideran un riesgo innecesario ya que podrían lesionarse, aún y cuando las reglas son distintas a los de los juegos normales para que sea más relajado.

El éxito del Pro Bowl es tan bajo que en 2012 el comisionado de la NFL, Roger Goodell indicó que el futuro de este juego de estrellas está en duda si las mejores no funcionan.

El Pro Bowl se juega este domingo 31 de enero en Hawaii y en México se transmitirá a las seis de la tarde, hora del centro, a través del canal ESPN.