¿Te ha pasado que con cierta vestimenta te sientes más feliz que con otra? ¿Tienes una prenda “de la suerte” para ocasiones especiales o de suma importancia? O incluso, ¿has notado que tu estado de ánimo depende de lo que traigas puesto?

La ropa es como una segunda piel y cada día te da la oportunidad de expresar quién eres; además, lo que eliges tiene un gran impacto en tu forma de pensar, sentir y hasta la manera en la que actúas frente a los demás.

Cuando le das valor simbólico a lo que llevas puesto, la confianza en ti mismo aumenta. ¿Por qué pasa esto? María Costantino, profesora de estudios culturales e históricos en el London College of Fashion, explica que esto es causado por el ‘efecto de la dopamina’.

La dopamina es una sustancia química que se produce en el cerebro causando felicidad y está relacionada con la motivación, la memoria y la atención. Cuando se libera en grandes cantidades, crea sentimientos que motiva a repetir un comportamiento específico.

Hacer cosas que te gustan como hacer ejercicio, cantar, comer tu platillo favorito o, así también, el enamoramiento provocan la liberación de dopamina; sin embargo, se ha comprobado que la ropa puede causar este mismo efecto.

Si bien existen diversas teorías sobre los colores y la influencia en tu estado de ánimo, esto no es universal, pues lo que hace sentir bien a unas personas no lo será para otras. Esto no se limita al color de las prendas, sino también a la textura, a la forma o al estampado.

Por ejemplo, en un estudio mencionado por la psicóloga de la moda, Shakaila Forbes-Bell, se encontró que las personas a las cuales les gusta vestir ropa negra tienen una mayor influencia en un grupo, ya que parecen tener más autoridad .

Si tu objetivo final es sentirte seguro y poderoso cuando vistes de negro, seguramente te seguirán sentimientos de alegría. Sin embargo, para alguien más, este mismo color puede causarle depresión o tristeza al asociarlo con el luto.

Además de que tu vestimenta influye en tu estado de ánimo, a continuación, te comparto 5 razones más de por qué deberías prestar atención a la ropa que escoges cada día:

Generas una buena primera impresión: la gente juzgará tu apariencia en menos de 2 segundos creándose una opinión sobre ti. Por lo tanto, la ropa que escojas para cada ocasión hablará por ti antes de que incluso digas alguna palabra.

Elevas tu autoestima: tu vestimenta es una forma de expresarte y el sentimiento que tengas con lo que lleves puesto, lo proyectarás hacia los demás. Confiar en tu atuendo impactará en tu autoestima, pues te mostrarás más seguro y confiado.

Proyectas mayor liderazgo: de acuerdo con Darlene Prince, CEO de Well Said, Inc., la apariencia influye fuertemente en la impresión de otras personas sobre tu éxito financiero, autoridad, confiabilidad, inteligencia y qué tan buen líder eres.

Mejoras tu productividad: un estudio de la Universidad de Columbia y California afirma que, al utilizar una vestimenta más adecuada a tu profesión, aumentas tu productividad, te consideras más competente y actúas para conseguir tus objetivos.

Llamas la atención: cuando te vistes de forma apropiada para cada ocasión, trasmites mayor confianza y las personas de tu alrededor lo notarán, logrando así que tus palabras tengan mayor impacto.

Ahora que ya sabes las razones por las que deberías prestar atención a la ropa que escoges cada día, busca aquellas prendas en tu guardarropa que te empoderen, te hagan feliz y ¡úsala! Tu branding personal se verá beneficiado enormemente al proyectar un buen estilo.