• El estudio de ventas de autos de lujo en EEUU fue presentado por la firma True Car ALG

• Al final del top tres se colocó Lexus, la marca de gama alta de Toyota, que tuvo un rendimiento un poco menor al de 2018

• BMW aseguró que su victoria en 2019 se debe a una oferta más joven y numerosa de vehículos de lujo

Hay varios rubros en los que una marca puede competir para posicionarse como la mejor de su industria. Por ejemplo, los premios que otorgan los expertos del mercado son un indicador de desempeño en teoría neutral y confiable. También el valor de las acciones o atractivo de inversión a largo plazo son grandes formas de mostrar la potencia de una compañía. Al mismo tiempo, cada segmento de la economía tiene diferentes formas de valorar a sus compañías.

En el caso de la industria automotriz, hay varios indicadores clave de desempeño (KPIs) que deberían de ver inversionistas, compañías por igual sobre una marca. De acuerdo con Think Layer, es crucial observar factores básicos como ingresos brutos y cuántos vehículos logra producir y distribuir. Guiding Metrics apunta que los costos de sus operaciones de producción son también cruciales. Por su parte, Forbes señala elementos como la satisfacción del cliente.

Pero lo cierto es que, tanto en la industria automotriz como en cualquier otra, son las ventas el número en el que más se fijan todos los agentes. Se trata de una medida muy completa. No solo muestra el interés que tiene la audiencia en los vehículos de la marca. Al mismo tiempo, da una muestra de la capacidad de producción de las compañías para satisfacer la demanda. Su relevancia es especialmente importante cuando se habla del preciado segmento de lujo.

BMW vuelve a destronar a Mercedes-Benz en ventas de lujo

De acuerdo con AdAge, las compañías del sector automotriz de Estados Unidos (EEUU) acaban de lanzar sus resultados de ventas para el segmento de lujo durante de 2019. En esta ocasión, el primer lugar fue para BMW, que pudo mover casi 330 mil unidades en el país. Se trata de un incremento del 4.4 por ciento con respecto a los números que registró durante el año pasado. Al mismo tiempo, representa una definitiva e histórica victoria para la marca.

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Y es que es la primera vez que BMW ocupa el primer lugar en ventas de autos de lujo desde 2015. No solo eso, sino que también logró vencer a su rival Mercedes-Benz. Esta automotriz terminó en segundo lugar, después de un 2019 donde mantuvo prácticamente igual su nivel de distribución de vehículos con respecto al año anterior. Esto se debe a que, de acuerdo con la compañía, las adquisiciones de sus modelos se redujo significativamente durante diciembre.

¿Qué significa esta victoria para la marca?

El entorno de los productos de lujo tuvo un 2019 bastante interesante. Más de una marca, entre ellas Nike, decidió incursionar a este segmento a través de alianzas especiales con otras empresas de la industria. En el sector tecnología, empresas como Apple y Samsung lanzaron dispositivos que, aunque estrictamente no pertenecen a este sector, sí están pensados para la misma audiencia. Asimismo, se espera un futuro relativamente brillante para este mercado.

Volviendo al caso de BMW, este triunfo es bastante positivo para la marca. Volver a colocarse en la primer posición del segmento de lujo al tiempo que logró aumentar su número de ventas, es un indicador determinante sobre la efectividad de su estrategia comercial. La compañía debe de reforzar la producción de modelos variados para la industria. Y al mismo tiempo, se tiene que seguir con la estrategia de marketing que implementó en 2019 para sus resultados.

Lo que también debe de tenerse en claro es que BMW ahora tiene una vara bastante alta que sobrepasar para 2020. La situación económica de todo el mundo podría afectar las ventas de los modelos de lujo en EEUU. Por supuesto, esto afectará también al resto de sus rivales. Así que la compañía no puede quedarse dormida en sus laureles. La marca tiene que redoblar el valor agregado de sus autos y su estrategia de comunicación para mantener su título en 2020.