Facebook atraviesa la que podría ser su peor crisis de reputación. Las prácticas de Cambridge Analytica que comprometieron la información de más de 50 millones de usuarios de la red social así como la responsabilidad que se atribuye a la red social por su incapacidad para garantizar la seguridad de los datos de sus suscriptores, han tenido efectos importante para el negocio de Mark Zuckerberg.

De acuerdo con información de Wall Street, hasta ayer, Facebook habría perdido más de 60 mil millones de dólares en valor de mercado, monto que supera la capitalización de mercado de Tesla (52 mi millones) y triplica lo correspondiente a Snapchat (19 mil millones).

El temor de los accionistas es resultado de la depreciación del principal activo que tienen este tipo e plataformas: la confianza en el manejo de datos que de ser gestionada de manera correcta supone un negocio millonario gracias a la publicidad, las necesidades de investigación así como de comunicación sólo por mencionar algunos.

La consecuencia de la brecha que este episodio de Facebook abrió sobre la importancia de la seguridad de los datos, tuvo un efecto domino en otras plataformas similares que también vieron caer el precio de sus acciones de manera considerable.

Según Google Markets, hasta las primeras horas de la tarde de ayer, Twitter reportaba una caída de 3.27 puntos (9.35 por ciento), fenómeno que se replicaba con Snapchat con un descenso de 0.65 puntos (3.96 por ciento).

Las consecuencia del reportaje firmado por diversos medios como The New York Times y The Guardian que fue dado a conocer el fin de semana pasado, exigían una respuesta por parte de los altos directivos de la red social quienes, hasta el momento, se habían manteniendo en completo silencio.

Ahora, a través de su cuenta de Facebook, Mark Zuckerberg, fundador de dicha red social, declaró sobre el hecho al tiempo que hizo una cronología sobre el paso de Cambridge Analytica por Facebook y las medidas de seguridad que la plataforma implementó desde 2007.

En su publicación, Zuckerberg reconoce que la red social cometió errores, asume su responsabilidad y explica cuáles son los pasos a seguir para evitar que una situación similar se repita en el futuro.

“Tenemos la responsabilidad de proteger sus datos, y si no podemos entonces no merecemos servirle. He estado trabajando para entender exactamente lo que pasó y cómo asegurarme de que esto no vuelva a suceder. La buena noticia es que las acciones más importantes para evitar que esto suceda de nuevo hoy ya nos hemos tomado hace años. Pero también hemos cometido errores, hay algo más que hacer, y tenemos que dar un paso adelante y hacerlo”, expresó el líder de la empresa tecnológica”, afirmó el CEO de Facebook.

Aunque el post de Zuckerberg puede aclarar algunas cosas, lo cierto es que es una respuesta que llega bastante tarde. Las jornadas de desconcierto ante el silencio inicial del directivo sólo agravan las sospechas de que este hecho es sólo la punta del iceberg de un problema mayor tanto para inversionista como para anunciantes y usuarios.

El tono del mensaje ha cambiado y la red social, ahora en voz de su líder, a pasado de una posición defensiva a una en la que se admite, cuando menos hasta cierta medida, la responsabilidad  de la red social.

Habrá que esperar para conocer el efecto que estas declaraciones pues tener en el negocio y reputación plataforma, que por ahora, parecen o salir bien librados.