De acuerdo con el Comité Paralímpico Internacional, se han vendido 600 mil entradas para los Juegos Paralímpicos, poco más del 20 por ciento de las 2.5 millones de entradas disponibles, lo que no es una cifra alentadora.
Por ello, diversas marcas se han sumado a la promoción de la justa, acaparando a su vez la práctica del marketing social, que 75 por ciento de las compañías emplea para producir un retorno de inversión, según Marketing Sherpa.
Entre esas empresas está la revista Vogue, que en su edición en Brasil lanzó una campaña en apoyo a los Paralímpicos, que se realizarán entre el 7 y el 18 de septiembre; sin embargo, las cosas no salieron como lo esperaba, y es que “Somos todos paralímpicos”, protagonizada por Cleo Pires y Paulo Vilhena, es criticada porque en lugar de colocar en foco a los atletas, colocaron a los actores y sustituyeron sus miembros con prótesis, pero con Photoshop.
Vogue respondió a las críticas y dijo que los actores son embajadores del Comité Paralímpico Brasileño y que representan a Bruna Alexandre, jugadora de tenis de mesa y Renato Leite, de voleibol sentado.
En este sentido, una campaña que logró el timing que buscaba con los consumidores es la implementada por British Petroleum, una compañía conocida por su patrocinio a atletas de diversas delegaciones en el mundo, que lanzó The Energy Within, logrando críticas positivas en redes sociales.