Decenas de marcas textiles alrededor del mundo confeccionan sus prendas con toneladas de algodón de Xinjiang, la región china sobre la cual pesan numerosas denuncias vinculadas a la violación de los derechos humanos.
Organizaciones sin fines de lucro, medios internacionales y hasta Estados Unidos y varios gobiernos europeos han advertido que en esa provincia en el extremo oeste de China los trabajadores de la minoría uigur son obligados a trabajar en los algodonales en condiciones infrahumanas.
Es por eso que marcas como Japan’s World y Mizuno se unieron a Nike y Uniqlo y, en mayor o menor medida, han adelantado que no utilizarán más el algodón que se produzca en esa región china.
Esto, indefectiblemente, tendrá dos implicancias:
Por un lado, escasez de artículos hasta que las marcas redireccionen la compra mayorista.
Por otro, subas de precio, advierte el medio japonés Nikkei.
¿Qué pasa en Xinjiang?
De un total de 50 grandes empresas textiles japonesas que se dedican a la confección y venta de prendas de vestir y artículos deportivos, más de la mitad reconoció en una reciente encuesta que adquiere algodón de Xinjiang.
Esto es un problema porque pone en evidencia que no será fácil reemplazar el insumo de forma rápida.
Tampoco tienen demasiadas alternativas si decidiera seguir usando ese algodón, porque ya hay problemas en algunos países. La aduana de los Estados Unidos, por ejemplo, impidió el ingreso de productos de Fast Retailing, compañía detrás de Uniqlo, por el uso del algodón de Xinjiang.
¿Faltará la ropa interior?
Los fabricantes de ropa interior de Asia también tendrán el mismo problema, porque la mayoría de las marcas que fabrican en China y en países del sudeste asiático se abastecen de la región de Xinjiang, la mayor productora del mundo.
Por ahora, no han hecho declaraciones respecto de cambiar de proveedores, aunque adelantaron que detendrán las compras si se confirma el abuso de los trabajadores.
Muchas marcas usan algodón de la India, pero no alcanza para abastecer un mercado de ropa interior y lencería que luego de la pandemia ha comenzado a reverdecer.
Nike y H&M
El problema está escalando día a día.
Nike y H&M, por ejemplo, fueron atacadas en las redes sociales chinas el mes pasado cuando expresaron su preocupación por el trabajo esclavo al que se estaría sometiendo a los trabajadores algodoneros de esa región de China.
De hecho, ambas marcas sufrieron un boicot que incluyó la salida de varios influencers chinos.
Incluso importantes empresas de comercio online chinas se sumaron al boicot contra los productos de Nike y los que se venden en las tiendas de H&M. Pinduoduo, JD.com y Tmall sacaron las marcas que se sumaron a la protesta de sus plataformas.
El Estado chino niega que exista esa situación.
Las sanciones que han pedido las ONG y los gobiernos occidentales incluyen la prohibición de viajes y el congelamiento de activos para los gobernantes y altos funcionarios de esa región de China.