A pesar de los indicios de que los consumidores (incluso los nativos digitales) prefieren comprar en tiendas físicas, que a través de internet, un 40 por ciento a nivel mundial considera que la compra en establecimientos como un ‘deber’ a ejecutar, según un nuevo estudio de CapGemini realizado en 9 países.
Otro estudio que acompaña al primero, realizado entre ejecutivos de retail, revela que estos son mucho más entusiastas sobre la utilidad de las tiendas físicas, que los propios consumidores, pues por ejemplo un 83 por ciento considera que son útiles para encontrar información y comparar productos, aunque apenas un 41 por ciento de los consumidores piense lo mismo.
De hecho, la dificultad para comparar productos es la principal frustración cuando se trata de retail stores, como cita el 71 por ciento. una cifra que podría estar relacionada con las grandes expectativas generadas por la compra online, como se desprende de otro estudio de Pew Research Center, en el que se encontró que casi un 60 por ciento de compradores online en Estados Unidos, señalan que comparan precios antes de comprar (tanto en físico como online).
Como frustración de los consumidores al comprar en tiendas físicas, le siguen las largas colas para pagar (66 por ciento), la falta de habilidad para encontrar los productos (65 por ciento), la falta de descuentos y promociones personalizadas (65 por ciento) y la no disponibilidad de guía y demostraciones dentro de las tiendas (64 por ciento).
La disponibilidad del productos y comparaciones son particularmente importantes y reflejan lo que los consumidores encuentran más útil de las tiendas físicas. De hecho un 75 por ciento espera poder conocer si conseguirá el producto antes de ir al establecimiento.
A lo que se suma, el que un porcentaje similar espera, según es estudio de CapGemini, que le sea entregado el producto el mismo día que ha sido adquirido en la tienda. Sin esa opción, muchos evitarían los establecimientos físicos, como señala un 71 por ciento que se cambiaría al comercio electrónico.
Finalmente, para un 57 por ciento, ir a una tienda debe ser una ‘experiencia’ más allá de la venta de productos. Datos que en su conjunto, muestran que las tiendas físicas deben revisar sus expectativas, versus las de los consumidores.