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Volkswagen entra en el creciente negocio de la fabricación de celdas de baterías.
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Los sueños eléctricos de VW son los más ambiciosos del mundo, aunque está aún muy retrasado.
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VW prevé inversiones millonarias para desarrollar movilidad eléctrica.
Volkswagen confirmó este lunes lo que, en parte, había adelantado en marzo: la marca hará ingreso al negocio de la producción de celdas de batería.
Asimismo, también dio a conocer que iniciará un proceso para determinar el futuro de algunas de sus empresas centradas en la industria pesada y que prepara reflotar su unidad de camiones en los próximos meses.
Las celdas de baterías son elemento vital para el recambio tecnoloǵico de la industria automotriz. Este es un “campo de batalla” que Tesla conoce muy bien y en el que Volkswagen quiere empezar a competir para no seguir perdiendo terreno.
Actualmente, la industria automotriz utiliza principalmente fabricantes de baterías asiáticos, según publicó Financial Times.
La fábrica de acumuladores de energía de VW estará ubicada en Baja Sajonia, en el norte de Alemania, y se gestionará a través de una asociación, dijo la marca.
Lo confirmó en una reunión de este lunes de la junta directiva que también aprobó un casi US$ 1.300 millones en inversiones.
Nuevos horizontes
Tras el dieselgate desatado en 2016, Volkswagen está decidida a tomar el control en lo que hace a la nueva generación de impulsores de vehículos, la gran pregunta es saber si está a tiempo. En especial porque hay competidores que han avanzado mucho más en los últimos años.
“Estamos avanzando con la electrificación y la digitalización de nuestra flota como ninguna otra compañía automotriz”, aseguró un confiado Herbert Diess en un comunicado donde el presidente ejecutivo de Volkswagen deja en claro cuáles son los objetivos.
“Al mismo tiempo, vamos a construir áreas de negocio innovadoras en los próximos años para atender servicios de movilidad fuera lo lo habitual. El objetivo es lograr que el Grupo desempeñe un papel decisivo en la configuración de la transformación radical de nuestra industria”, agregó Diess.
Lo que busca VW con las baterías es tener el control de al menos parte de la provisión de un insumo clave para el futuro del automóvil. Sabe que las baterías son el petróleo de la nueva generación de vehículos y no quiere estar ausente del negocio.
El objetivo del fabricante alemán es producir unos 22 millones de carros entre 70 modelos diferentes en la próxima década.
Volkswagen reveló ventas de por 235.800 millones de euros en 2018, con un beneficio neto de 12.150 millones. Un número realmente extraordinario para una compañía que dos años antes soportaba el mayor escándalo de la industria automotriz moderna: el dieselgate.
Como dijimos, actualmente la industria obtiene las baterías casi por completo de fabricantes asiáticos.
Fue la propia Angela Merkel, canciller alemana, que advirtió sobre esto. “No estoy segura si es algo bueno [los autos eléctricos] si no sabemos qué sucede con la fabricación de estas células. Trataré de impulsar un desarrollo europeo”, dijo Merkel, agregando que no estaba segura de confiar plenamente en China, hoy el mayor fabricante.