Las redes sociales son semillero del odio y los comentarios racistas, sexistas y xenófobos. Un comediante alemán se cansó de reportar tweets nocivos y decidió pintarlos afuera de las oficinas de la compañía.
Shahak Shapira es un comediante israelí con base en Berlín que asegura haber reportado durante seis meses más de 300 comentarios con mensajes de odio en la red social Twitter y sólo tuvo respuesta en nueva casos.
Para poner en evidencia la falta de acción por parte de Twitter, Shapira pintó decenas de mensajes reales en la banqueta, justo afuera de la oficinas de Twitter en Hamburgo.
“Si Twiter me obliga a leer estas cosas, entonces que ellos también tengan que verlas”, dice Shapira en el video que promueve el hashtag #HeyTwitter. Agregó que Facebook tiene mejor respuesta a este tiempo de quejas: el 80 por ciento de 150 reportes.
La libertad de expresión en social media ha abierto la puerta a personas y grupos con mensajes de odio que buscan promover ideas de racismo y discriminación, o simplemente quieren hacer sentir mal o molestar a los demás.