Piñatería Ramirez, una de las marcas mexicanas más populares de productos para fiestas, decidió que hacer una piñata de uno de los casos virales del momento, cuando una persona no binaria le pidió a sus compañeros en clase que le llamen “compañere”.

La grabación muestra como en medio de una clase por Zoom, Andra Milla le pide a su compañero que no utilice el término compañera, sino “compañere”.

Este acto ha creado todo un debate en redes sociales, en donde hubo uno que otro que salió a defender a Milla, mientras que tampoco faltaron quienes buscaron hacer burla del video viral.

Piñatería Ramirez crea piñata compañere 

Desde sus redes sociales, la piñatería compartió lo que sería un nuevo modelo a su colección: una piñata de Andra Milla, lo que generó controversias entorno a las razones sobre las que la empresa lo hizo.

“Habemus piñata Por que!!…. “No soy tu compañera ,soy tu COMPAÑERE ” No soy tu piñata soy tu PIÑATE sin miede al exite RESPETEN SOBRINES! Saludos a mis clientes no binarios (SIC)”, se lee en el post de la famosa empresa ubicada en Reynosa, Tamaulipas.

La acción del negocio hizo que los usuarios en redes sociales se lanzaron en contra de la Piñatería Ramirez, pues la piñata estaría provocando que el bullying mediatico en contra de la persona no binaria continúe en las redes sociales.

“Quieres hacer burla de el pronombre elle y meten al lenguaje inclusivo, si quieren hacer ‘burla’ de algo mínimo investiguen, lo mejor es qué hay pures viejites aquí, ya van pa’ fuera”, aseguraron en Facebook.

“No salgas con pendejadas de que es tu libre expresión. Hasta eso tiene límites y los cruzaste, no por ignorante, sino porque quisiste”, añadió un usuario en Twitter.

No obstante, también hubo quienes recibieron la piñata con humor y no vio el hecho como algo ofensivo contra la persona en cuestión.

¿Es correcto o incorrecto? 

Si bien, esta no es la primera vez que la Piñatería Ramirez decide utilizar una tendencia viral para crear una piñata y llamar la atención de las redes sociales, sin embargo, hasta el momento muy pocos de los ‘afortunados’ en tener una piñata han mostrado descontento o interés en responder al acto.

Hoy por hoy, el lenguaje inclusivo es considerado para mucho como parte de una revolución en la comunicación la cual, con el tiempo, sigue transformándose y adquiriendo nuevas formas de emplearse, sin embargo, también hay quienes señalan que, en este caso, es un exceso sin fundamentos.

Más allá de las justificaciones de cada postura, lo que deja en claro este debate es que el tema de la inclusión está sobre la mesa y genera interés general, por lo que este debe ser un tema que las marcas deben abordar con especial cuidado.

Considerando que, según el reporte de Earned Brand de Edelman, lanzado en 2018, los consumidores esperan que las marcas tomen una postura ante temas sociales e inclusive dos tercios de estos señalaron ser compradores motivados por las creencias, las acciones que emprenda una marca pueden ser vitales para tener éxito en el mercado.

Hoy por hoy, el desafío cultural para las empresas e inclusive los propios consumidores es más grande ante la diversidad que es cada vez más amplia y por la que todas, todos o todes siguen luchando para que se reconozca haciéndolo visible desde el lenguaje.

Sin embargo, parte fundamental también es conocer a la audiencia de las marcas, pues aunque los avances en temas de inclusión son celebrados por muchos, para algunos el lenguaje no forma parte de estos. Al reconocer a su audiencia, las empresas pueden determinar si implementar esta forma de comunicación resultará exitosa o terminara por causar problemas para su marca o servicio.