Sigue creciendo el número de marcas (y grandes) que están interesadas en incorporar los camiones eléctricos de Tesla y la razón no es por que sean bonitos o económicos; ahora es la trasnacional PepsiCo la que se suma.
¿A qué se debe este interés? Se estima que en 2016 había alrededor de 1,2 millones de vehículos eléctricos en circulación en todo el mundo, según datos de IEA, sin duda un número pequeño si se considera que para este año se estima que se venderán cerca de 78 millones 590 mil autos, según proyecciones de Scotiabank.
Pero, si bien aún hay muchos más autos con motor de combustión interna en circulación, también está claro que la industria automotriz está viviendo un periodo de transición y el futuro se dirige hacia los vehículos eléctricos, un mercado que de acuerdo con Transparency Market Research para 2019 tendrá un valor mayor a los 271 mil millones de dólares.
Por su puesto que esto no es a lo que ponen atención las marcas que están haciendo pedidos a Tesla por su ‘semi truck’, la intención es otra y no tiene nada que ver con el precio de estos vehículos.
De acuerdo con Mike O’Connell, uno de los ejecutivos de PepsiCo, citado por la agencia Reuters, la compañía hizo un pedido de 100 Tesla Semi para sumarlos su flota de 10 mil camiones e incorporarlos a algunas rutas con envíos de menos carga por Estados Unidos.
Fue hace sólo unas semanas que la compañía de Elon Musk presentó una de sus más grandes apuestas por ser líderes en la industria de vehículos eléctricos: el Tesla Semi.
Se trata de un un modelo que sin remolque tiene una autonomía de 800 kilómetros con una sola carga y pasa de 0 a 100 km/h en cinco segundos y una capacidad de carga de hasta 36 toneladas, pero su aceleración se reduce, pasa de 0 a 100 km/h en 20 segundos. Y, según la compañía con sede en Silicon Valley, este camión “aumenta la seguridad y reduce significativamente el coste del transporte comercial”.
Suena interesante, pero son hablamos de camiones que aún no inician su producción y que se requiere un mínimo de 5 mil dólares de anticipo por unidad que, por cierto tiene un precio base de 150 mil dólares.
La respuesta está en que muchas grandes compañías buscan ser más socialmente responsables, en concreto, tienen como meta reducir significativamente sus emisiones de contaminantes y, sus flotas de transporte son un factor importante.
Según los reportes de prensa, la intención de PepsiCo con esta adquisición es reducir sus emisiones de CO2, ya que tiene como meta hacerlo en un 20 por ciento para 2030.
Esta es la misma razón de Anheuser-Busch (los dueños de Budweiser y Bud Light) otra compañía que anunció un pedido hace sólo unos días y, es muy probable que también forme parte de los planes de Walmart y DHL, compañías de peso mundial que se envistan entre los clientes de Tesla, que ya suma casi una veintena de empresas.