Internacional.- Es un tema de sobra comentado pero nunca está de más continuar incidiendo en los riesgos que pueden suponer las redes sociales para los niños y adolescentes. En estas edades suelen pecar de inocentes y, detrás de un ‘amigo’ al que acaban de añadir a Facebook y que parece tener idénticas aficiones, puede encontrarse un pederasta con oscuras intenciones. No en vano, lo único que conocen de este contacto es una fotografía de perfil que bien podría ser falsa. ¿Es eso realmente una garantía?

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El famoso youtuber Coby Persin ha colgado hace escasos días un vídeo en el que demuestra lo sencillo que es engañar a un niño en Facebook y, lo peor, secuestrarlo. Para ello, se creó un perfil falso de un supuesto adolescente de 15 años y comenzó a agregar a chicas de la zona. Habló con algunas de ellas hasta que consiguió sus números de Whatsapp para así poder mantener una conversación más directa.

El siguiente paso fue tratar de quedar con ellas. Una de ellas, incluso, no tuvo el menor reparo en invitarle a su casa, explicándole que estaba sola; otra, accedió a que la recogiera en coche el padre de su nuevo amigo. Lo que las adolescentes ignoraban es que sus propios padres eran cómplices del joven youtuber, los cuales, de hecho, estaban a la espera para comprobar si, realmente, sus hijas consentirían abrir la puerta a un desconocido, quedar en un parque o entrar en un coche ajeno.

El vídeo, que representa situaciones que perfectamente podrían ser reales y que llega con el ánimo de alertar tanto a padres e hijos adolescentes, se ha convertido en viral y ha sido visualizado por más de 30 millones de internautas en YouTube.