Después de definir su target y para consolidar su éxito, una marca necesita construir una audiencia desde distintas plataformas, para posteriormente generar conversaciones con las audiencias, desde clientes, amigos, no obstante, el objetivo debe comenzar a probarse en una primera plataforma.
Después de una investigación de mercado y de tener un mensaje claro, la marca debe construir su plataforma para que cuando llegue el momento colocar el público de seguidores en los canales adecuados. Para ello, la compañía o producto debe contar una historia y convertir las perspectivas en clientes potenciales.
Lo ideal es elegir dos redes sociales para enfocar el tiempo y energía en las publicaciones adecuadas pero realistas, lo cual definirá un nicho perfecto. Después de generar los primeros seguidores, una marca debe comenzar a prestar más atención y participar más en sus perfiles de redes sociales, ya que cuanto más activo, más visibilidad construirá.
Dependiendo el tipo de contenido, la marca deberá especializar su contenido, ya que si publica cine podría hacer preguntas sobre películas, géneros, autor, libros, personajes, entre otros.
Posteriormente, se debe programar contenidos cada 30 minutos, publicar y participar, ya que los clientes potenciales, ahora fans buscan conexión y reconocimiento porque quieren ser vistos y escuchados. Se trata de una construcción de “capa por capa”. Además, debe existir 1 o 2 formas de contenido, de tal modo que la dinámica se convierta en compartir mensajes y filosofía de la marca.