Sin duda, uno de los factores que incrementan el valor de marca país es su atractivo turístico, ya sea por contar con destinos naturales e históricos, o por generar una infraestructura que invite a los viajeros de todo el mundo a visitarlo.
Uno de los factores que hacen posible el flujo de viajeros por todo el mundo es la portación de un pasaporte que sea aceptado en cualquier país, más aún, que sea libre de visa, un requisito que, como todos saben, en algunos casos no es tan sencillo de obtener -como en Estados Unidos-.
En el caso del pasaporte mexicano, se mantiene como uno de los más poderosos a nivel global, ya que es libre de visa en 130 países, lo que lo ubica en el sitio número 24 del Passport Index 2017.
El ranking elaborado por Arton Capital sobre los pasaportes más poderosos del mundo, posiciona al de Alemania en la cima, pues las personas alemanas pueden visitar 160 naciones libres de visa. Le siguen Suecia (159). Mientras que Dinamarca, Finlandia, Francia, Reino Unido y Noruega, entre otros países que comparten el tercer sitio, cuyos ciudadanos pueden viajar libres a 158 países.
El pasaprote de Estados Unidos está en cuarto sitio, junto al de Italia, Suiza, Holanda, Bélgica, Austria, Corea del Sur y Portugal (157 países).
Cabe señalar que muchas veces el atractivo de una nación como destino turístico se ve afectada por diversos factores ajenos a la propia industria relacionada con la atracción de visitantes, entre ellos, tensiones políticas, conflictos bélicos, y situaciones económicas o sociales.
En el caso de México, por ejemplo, durante diciembre pasado el turismo egresivo o de salida, tanto aéreo y terrestre, fue de aproximadamente un millón 028 mil viajeros, 13.4 por ciento menos que el mismo mes de un año antes, de acuerdo con datos del Banco de México. este resultado se debe, en gran medida, al encarecimiento del dólar frente al peso y a que Estados Unidos es el principal destino de los mexicanos.
Otro factor es que el endurecimiento para otorgar la visa por parte del gobierno estadounidense y, pese a que no se han anunciado políticas específicas para México, la tensión entre ambos países y acciones contra inmigrantes mexicanos hacen pensar que no será tan sencillo obtener este requisito migratorio por lo que haber la oportunidad para que los turistas consideren otra opción para sus viajes.