Las lentes anamórficas normales son incosteables para los artistas de la imagen más independiente, que sumado al hecho de que la mayor parte de las personas hoy toman fotografías con sus teléfonos celulares, pues da pie para la aparición del adaptador anamórfico para iPhone desarrollado por Moondog Labs.
Las lentes anamórficas se introdujeron en el cine durante la década de los 50 para crear una experiencia panorámica cuya intención era el aprovechamiento de grandes escaparates horizontales, para crear un sentido único de profundidad o dimensión, así como la falta de definición de las áreas fuera de foco.
Sin embargo, debido a la complejidad y el costo de la óptica implícita, las lentes anamórficas no son accesibles para los realizadores más independientes, por lo que Moondog Labs desarrolló un asequible adaptador de 1.33x iPhone 5 y 5S, para obtener escenas de un 33% más amplio alcance y que en la actualidad promueve para su producción masiva en Kickstarter.