La mercadotecnia es un concepto relativamente moderno, sin embargo, las ideas existen desde que el ser humano encontró diversas maneras de expresarlas.

En el siglo XV, Miguelangelo mencionó que “la genialidad radica en la paciencia”.

Hoy entendemos a la genialidad como la capacidad y facilidad que tienen algunas personas y/o empresas para crear o inventar cosas nuevas y admirables. En una sola, robusta y contemporánea palabra: Innovación.

Y es justamente la innovación el proceso que buscamos y del cual dependemos día a día todos los que formamos parte del ecosistema de la mercadotecnia.

En estos momentos que estamos viviendo, en donde a la adversidad se le suma incertidumbre y, con el paso de cada semana, se agrega a gotas y hasta a chubascos la desesperación, el reto de mantener la calma se hace aún más complejo.

Ya no solamente estamos pensando en ¿cómo seguir?; las marcas y empresas de diversos tamaños nos cuestionamos ¿cómo sobrevivir?

No tengo el afán de sonar fatalista, por el contrario, verdaderamente pienso que el que esté dispuesto a ver la realidad, por más dura que sea, podrá enfrentarla y encontrar soluciones, trazar nuevas estrategias, reinventar sus procesos de planeación, producción y ejecución de campañas que contribuyan a que productos, servicios, medios y audiencias vean la luz, en medio de tanta oscuridad.

Para los que deseen sobrevivir, no hay tiempo que perder en quejas o en sentirse víctimas; finalmente, si algo nos muestra la historia, es que el camino siempre presenta tropiezos. Hemos visto, en la última década, cómo distintas industrias han sido muy golpeadas: retail, agencias de viajes tradicionales, restaurantes, cafeterías y el sector de la movilidad, entre otras.

Hemos sigo testigos también de ver cómo otras empresas y productos han desaparecido por completo: videocasetes, DVDs y CDs, por nombrar algunos, y no fue por un virus, ni por una guerra, simplemente fue porque el mundo sigue girando y en constante evolución.

Muchos negocios han desaparecido por quedarse en su zona de confort, por su aferre y nostalgia a la tradición y por menospreciar aquella genialidad de algunos game-changers que se han atrevido a reinventarse, crear y ofrecer contenidos, campañas y experiencias únicas y de gran valor para sus audiencias y consumidores.

Por lo tanto, la paciencia sumada a la perseverancia, no es sólo una frase un tanto poética; es la estrategia que, llevada a la práctica de manera asertiva, se convierte en una combinación realmente poderosa para la mercadotecnia, sin importar el segmento al que nos dirijamos porque sin duda, ciertos hábitos, intereses y prioridades van a cambiar. Así que, considero que lo que debemos de preguntarnos no es solamente ¿por qué? y ¿qué?, sino: ¿Cómo haremos lo que hacemos en un mundo diferente? En un mundo que ya es y será discrepante.

La oportunidad radica en que seamos pacientes, sin confundir el término con pasividad. Son tiempos de entender a fondo que las semillas que uno planta, no son las frutas que comemos el mismo día, que arar la tierra no es fácil, no es inmediato, pero sin duda, los resultados son ampliamente satisfactorios.

Si bien, desarrollar y encontrar paciencia es probablemente de las cosas más difíciles de conseguir, habiendo nacido y estando acostumbrados a vivir en un mundo de inmediatez y prisa, es momento de estudiar, analizar tendencias, necesidades y nuevas conductas de compra; proyectar, en conjunto con nuestros equipos de trabajo, escenarios positivos y negativos y, a partir de ahí, estar preparados para adaptar de la mejor manera los planes, estrategias, mezclas y presupuestos de mercadotecnia, a pesar de la alta dosis de dudas que podamos tener. Recomiendo ampliamente no asustarse de las pausas, la introspección y la autocrítica.

Desarrollar paciencia implica una actitud ante la vida, no solamente enfocada al mundo laboral, pero son aquellos que lo tomen como una ocasión  para aprender, relajarse un poco, cargar pilas, cobrar aún más fuerza y tener la capacidad de ver la pantalla completa,  los que comprobarán que será la clave del éxito y, de esta manera, podrán sentir y aplicar lo que dice Rachel Platten en su canción Fight Song:  “I´ve still got a lot of fight left in me”.