Los actores políticos construyen su imagen a lo largo de años de trabajo y de acuerdo a su personalidad e ideología. Este capital político, en el que también están sus éxitos, se coloca a prueba quedando expuesto cada día ante la opinión pública.
En consecuencia, todo político, candidato o gobernante, debe estar consciente que su trabajo, diseño de programas y discurso, están dentro de una bolsa de valores que pueden irse dilapidando ante cualquier error que cometa frente al ojo ciudadano y mediático.
Alguien que no pertenezca al sector de la comunicación política pudiera pensar que el trabajo de un político es una tarea fácil, pero es todo lo contrario. El trabajo de un gobernante debe apegarse a cronogramas, indicadores de gestión, de transparencia y conducción ética.
Lo anterior se vuelve más complicado dado el escrutinio que realizan las redes sociales acerca de las actividades de los integrantes de la esfera pública.
El caso de Pablo Iglesias, el legendario líder de la agrupación española Unidas Podemos, viene al caso toda vez que acaba de anunciar su retiro de la actividad política, resultado de su derrota en la elección por la asamblea madrileña.
Fue tan duro el revés electoral recibido que Pablo deja su vicepresidencia, el cargo de secretario de su partido del cual fue fundador y su escaño en el congreso.
Pablo ha cortado con toda aspiración pero también de manera simbólica ha cortado su clásica coleta y cabello largo, lo que presupone que dejando atrás su revolucionaria imagen suspende todo regreso al ruedo político. Esto en política es un mensaje poderoso. Borrón y cuenta nueva.
El equipo cercano de Pablo Iglesias ha comentado que éste ya venía pensando cortarse el cabello por la incomodidad ante la ola de calor y los jalones que sus hijos le hacían a su icónica coleta que utilizaba desde la creación del partido en el año 2014.
Lo cierto es que este cambio de look que aparece registrado en una foto del diario la Vanguardia en donde se ve a Pablo sentado en una mesa con el cabello corto y leyendo un libro queda evidenciado que lo que venga para Pablo no será dentro del sector político dejando claro que una imagen habla más que mil palabras.
Nos encontraremos más adelante.