Internacional.- Aún cuando después de ver el resto de anuncios, puede entenderse que no se buscaba la burla, caricaturizar el momento en que a la escolar paquistaní Malala Yousafzai es tiroteada por los talibanes en el rostro por reclamar su derecho a la educación, como parte de una publicidad para vender colchones, ha sido una idea poco acertada y por ello la agencia ha reaccionado con una disculpa personal a la joven activista de los derechos humanos.
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Ogilvy & Mather se ha disculpado por el anuncio creado en su oficina de India para la marca de cochones Kurl-On, asegurando que va en contra de “las creencias y parámetros profesionales” de la agencia y de sus clientes.
Así mismo explican que “Lamentamos profundamente el incidente y queremos disculparnos personalmente con Malala Yousafzai y su familia. Estamos investigando como se han visto comprometidos nuestros parámetros en este caso y tomaremos las medidas correctivas que sean necesarias. Adicionalmente hemos comenzado una revisión de nuestros procesos de aprobación y supervisión en nuestra red global, para asegurarnos de que nuestros estándares no vuelvan a verse comprometidos otra vez.”
En el anuncio puede verse como una caricatura de la adolescente, recibe un disparo en el rostro y va cayendo al colchón, desde donde rebota para ir a recoger un premio, de los muchos que ha recibido por su valentía al enfrentarse a los talibanes. Todo para ilustrar la frase: Bounce Back.
La joven paquistaní Malala fue tiroteada en el rostro y cuello por un tirador talibán que asalto en autobús escolar en el que viajaba el 6 de octubre de 2012, pues gracias al blog que escribía desde hacia un tiempo en defensa del derecho a la educación, que los talibanes habían suprimido en la zona, se había convertido en una amenaza para las ideas extremistas de este grupo.
El desatinado anuncio era parte de una campaña en la que también se han elaborado versiones de los carteles, protagonizados por las caricaturas de Gandhi y Steve Jobs.
