El SEO o Gestión de Optimización de Buscadores es una de las prácticas más importantes de la mercadotecnia digital, pero una de las más subestimadas y mal gestionadas en nuestra región.
Constantemente me encuentro con agencias, empresas y especialistas que al mencionar el tema me dicen: “Mi diseño incluye SEO” “Me venden el sitio con todo y SEO”, o el peor de todos: “Ya le hice el SEO”.
La gestión orgánica para optimización en búsquedas es fundamental, requiere de importantes habilidades tanto técnicas como mercadológicas, pero no implican una sola actividad, es un proceso continuo, que puede ser largo y costoso, pero repercute en grandes beneficios. Por eso hablar de “hacerle SEO” a un sitio implica solo la colocación de datos básicos y rápidos como Meta Data y palabras clave, pero esto va mucho más allá.
Resulta que la meta data y las palabras clave son solo uno de varios componentes para el SEO profesional, y una de las prácticas más relevantes en la consideración de Google en su algoritmo, tiene que ver con la práctica del “Link building” o la obtención de ligas referenciadas desde sitios externos. Link building es tediosa, más compleja y laboriosa, pero es la más potente de las prácticas de SEO actualmente. Por eso odio cuando alguien pretende tomar el SEO a la ligera.
Más allá de desahogarme, quiero compartir una serie de recomendaciones para obtener links de sitios externos que apunten al nuestro, basado en el uso de algunas herramientas tecnológicas muy prácticas para este fin:
Identificar los blogs con mayor autoridad y site authority (se puede validar con herramientas como Buzzsumo, ahrefs o Moz). Una vez que logramos esto, es muy sencillo contactar al responsable editorial y ofrecer nuestro apoyo con algún contenido relacionado con ellos.
Establecer comunicación por vía de redes sociales y/o un correo electrónico, solicitando participación como “Guest blogguer” o bloguero invitado. El bloguero invitado tiene el beneficio de agregar contenido a un portal externo, pero puede negociar la colocación del valioso link dentro del contenido del mismo.
Enumerar a los clientes, proveedores e intermediarios de la empresa para solicitarles personalmente la colocación de un link en su sitio que apunte hacia el nuestro, y hacer lo mismo en reciprocidad hacia ellos. Es una oferta difícil de rechazar.
Participar en directorios. Buscar en Google los directorios más relevantes de nuestra industria en Internet, registrarnos en ellos y apuntar links hacia nuestro sitio. Solo tengamos cuidado que no se traten de directorios falsos o de baja calidad, misma que se puede validar en herramientas como Moz o SEM Rush.
Vincular nuestras páginas en redes sociales, es otra práctica que ayuda, tanto en la colocación del link en la carátula de las redes como en algunos contenidos.
Participar en foros públicos o grupos. La participación de foros abiertos, grupos de Linkedin o de Meetups pueden permitirnos agregar contenido con links que apunten a nuestro sitio.
Lo anterior me permite ejemplificar que el SEO es una labor continua, no toda propia de un programador Web o diseñador, con implicaciones de labor continua y negociación, lo que refuerza mi molestia cuando banalizamos el SEO como un táctico de una sola vez, cuando ésta requiere de espero y tiempo, pero tiene importante retorno de inversión, y es cierto.