• Previo en la semana, Sony compartió expectativas positivas para su unidad de videojuegos

• Asimismo, dijo que esperaba que su nuevo filme, Demon Slayer, tuviera un arranque positivo en el mercado japonés

• En 2017, la compañía nipona adquirió el estudio Funimation Pictures por unos 143 mdd

A la vuelta de la esquina de que llegue la nueva generación de consolas, Sony ya está fijando la mira en su próximo proyecto: el streaming de Video-On-Demand (VoD). En datos de Reuters, la compañía de electrónicos y gaming habría hecho una cuantiosa oferta a AT&T para adquirir el sitio de contenido anime Crunchyroll. La idea es específicamente permitir a la tecnológica japonesa la posibilidad de competir con Netflix y otros rivales de escala global en el mundo.

El trato fue reportado inicialmente por Nikkei el viernes. De acuerdo con el medio, Sony y AT&T están ya en el proceso final de las negociaciones. Crunchyroll podría ser vendida a la dueña de PlayStation por más de 100 mil millones de yenes. Esto sería equivalente a poco más de 957 millones de dólares (mdd). Un vocero de la compañía japonesa se rehusó a dar un comentario a Reuters. Sin embargo, se cree que la tecnológica tiene amplias ambiciones para esa compra.

La idea sería no solo competir con Netflix gracias a los 70 millones de suscriptores que este servicio de streaming tiene alrededor del mundo. Sony también utilizaría la plataforma para crear y distribuir su propio contenido, incluyendo películas y música. De acuerdo con Reuters, se trata de una estrategia más generalizada de la tecnológica nipona para diversificar fuentes de ingreso. Esto, en respuesta a la constante caída en el rendimiento de su unidad hardware.

¿Una apuesta que le permitirá a Sony competir con los gigantes?

Es interesante esta significativa inversión que la dueña de PlayStation está haciendo en esta plataforma de streaming. De acuerdo con Variety, hace solo un par de días que Sony Pictures se vio forzada a establecer una serie de despidos dentro de su organización. Entre los más afectados se encontraron los departamentos de marketing y distribución. Por lo mismo, es muy llamativo que se haya decidido a comprar Crunchyroll cuando sus actuales activos sufren.

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Al mismo tiempo, no resulta del todo inesperado que Sony esté apostando tan fuerte a este tipo de negocios. De acuerdo con Statista, la unidad de películas de la compañía nipona ha ido creciendo de forma sustancial a lo largo de los años. Al mismo tiempo, su unidad de juegos y servicios en línea ha perdido un poco de poder en 2019. Si bien es posible que se le de un impulso a estas ganancias durante 2020, refleja una tendencia generalizada a la baja.

Y en este sentido, el streaming de VoD puede ser una buena oportunidad de crecimiento. En datos de Valuates Reports, se espera que el mercado tenga un valor de 149 mil 340 millones de dólares (mdd) para 2026. Esto representa una tasa de crecimiento de 18.3 por ciento anual compuesto entre 2018 y ese año. Cierto, ya el mercado está muy saturado de rivales.  Pero con la integración de las varias unidades de entretenimiento en Sony, podría tener resultados.

Streaming vs gaming, ¿cuál será el ganador dentro de la marca?

También es interesante la compra de Crunchyroll en el contexto de la próxima generación de las consolas. La compañía anunció hace poco justamente que su PS5 tendría pre-instalados los servicios de Netflix y Disney Plus. Algo que podría ser un disparo en el pie, suponiendo que  siga adelante con la compra de esta plataforma de streaming. Y es que, si planea competir de forma seria en VoD, necesitará toda la ayuda posible de otras unidades dentro de su negocio.

Por otro lado, podría ser justo la ventaja que necesita para sobreponerse a Microsoft, su mayor rival en gaming. La compañía de Bill Gates no tiene todavía un sistema de streaming VoD, pero sí ha hecho un esfuerzo muy duro en construir capacidades de cloud gaming que superan por mucho las de la misma Sony. Y al mismo tiempo, Xbox ha estado comprando estudios de gran impacto y diciendo que no va a ceder estos juegos a plataformas fuera de su ecosistema.