A falta de nueve días para que den inicio los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang 2018, las noticias alrededor del evento han sido múltiples, siendo las más importantes las referentes a la política, y es que una delegación de Corea del Norte ha llegado al vecino país del sur para participar en la justa.

Asimismo, se indicó que la bandera de la nación al frente de Kim Jong-un fue izada en la sede del evento, gracias a la dispensa especial acordada por la justicia para evitar que los organizadores vulneren la ley.

De igual forma, a poco más de una semana de que se lleve a cabo de la ceremonia de inauguración, se informó que para esta edición fueron distribuidos 110 mil preservativos, 10 mil más que en Sochi y Vancouver, es decir, cerca de 38 por cada atleta.

Los anticonceptivos y dispositivos profilácticos fueron donados por un fabricante surcoreano así como una asociación para la prevención del sida, dieron a conocer las agencias informativas. Las delegaciones de los 92 países participantes, integradas 2,925 deportistas que competirán por 306 medallas en 15 disciplinas, aunados a federativos y prensa podrán hacer uso de los preservativos.

Además de que los anticonceptivos estarán disponibles en las villas olímpicas, centros de prensa y estadios; los productos, a su vez, servirán también para desarrollar una campaña de prevención contra el virus del VIH. En tanto, se indicó que la firma Convenience CO. destinará 100 mil preservativos de la marca Barunsengkak, lo que le servirá para, según ellos, consolidarse como la marca líder en aquella nación.

En tanto, la empresa de los productos de latex consideró que sus productos pueden ser considerados como un recuerdo de la participación de atletas, delegados y periodistas en los Juegos Olímpicos de Invierno.

Y es que, según la AFP, en este tipo de organizaciones, la actividad sexual es notoria antes, durante y tras la finalización de la competencia; la tradición de donación de preservativos existe desde los Juegos Olímpicos de Verano de Seúl, Corea del Sur, en 1988.

Uno de los fenómenos que alentó este tipo de prácticas son las aplicaciones de citas casuales como Tinder o Hppn, que facilitan los encuentros comerciales; ejemplo de ello fue los sucedido en Londres 2012, en la que, colapsó la herramienta Grindr, orientada a la comunidad homosexual, en el momento en que arribaron las delegaciones, según el Daily Mirror.