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De acuerdo con Google, este tipo de estafas son “extremadamente raras” en la práctica de publicidad digital
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Según eMarketer, en 2019 se perdieron unos cinco mil 900 mdd en fraudes dentro de esta industria a lo largo de todo el mundo
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Asimismo, sería la principal preocupación de agencias y expertos de marketing programático
Uno de los temores más grandes que debería tener prácticamente cualquier empresa del mundo es la ciberseguridad. Y es que los ataques de agentes maliciosos pueden tener varias repercusiones en el negocio de sus compañías. Está el clásico incidente de ser una víctima de hackers. Pero también existe el riesgo de perder los datos de la empresa y que sean usados para explotar a los clientes. Además, hay una multitud de peligros en la parte de la publicidad.
Estos riesgos varían de caso a caso. De acuerdo con Bitclave, hay compañías y proveedores de publicidad que podrían aprovechar los anuncios para cometer actos como la recopilación de datos sin permiso de los usuarios. Adspeed señala que muchas organizaciones pueden usar comerciales digitales para promocionar sus estafas y esquemas de fraude. Y según Brand24, está el uso maligno del tráfico no-humano. Es decir, visitas hechas por varios bots.
Dentro de esta última categoría, el principal riesgo que hay en la publicidad es el fraude a los anunciantes. Algunos proveedores y sitios aprovechan bots para incrementar el número de vistas que supuestamente recibe un comercial particular. Y así, se les suele pagar mucho más. Dado que estos incidentes son tan comunes, plataformas como Google luchan arduamente para reducir su frecuencia. Sin embargo, ya habría consecuencias inesperadas en esta lucha.
Un nuevo formato de estafa en publicidad digital
Krebs on Security acaba de lanzar un reporte en un tipo de estafa para los dueños de sitios web. La página señala que agentes maliciosos han estado mandando correos electrónicos donde se amenaza a los dueños de estas plataformas. Se les pide un pago de cinco mil dólares en Bitcoins. Si no se les deposita la suma requerida cuando se solicita, entonces se les promete que recortarán los ingresos que perciben en publicidad a través de Google AdSense.
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El sistema es relativamente sencillo. Los agentes maliciosos, si no reciben el dinero, inundan la página de su víctima con bots simples y fáciles de detectar. Éstos contribuyen a aumentar, de una forma rápida y anormal, el número de ingresos que recibe el sitio web por publicidad web. Lo anterior generaría una alerta en Google, que suspendería el comercial o la página completa en lo que investiga el asunto. En el proceso, las compañías podrían perder muchísimo dinero.
Defenderse de nuevos esquemas de estafa
Parece que, tanto en publicidad como en otras industrias, mientras se pueda hacer dinero fácil amenazando y engañando a otros, siempre existirán las estafas. Hace unas semanas se acusó a Tous de vender joyas rellenas de plástico. En octubre de 2019, una compañía llamada Ads Inc habría quitado miles de millones de dólares (mdd) a usuarios de Facebook con un sistema de suscripción. Y los fraudes en apps le cuestan al mercado unos dos mil 300 mdd cada año.
¿Qué pueden hacer las empresas para evitar ser víctimas de este tipo de fraudes y estafas en la publicidad digital? De acuerdo con Krebs on Security, Google está enterado de los intentos maliciosos de sabotaje de estos agentes maliciosos. En una declaración al sitio especializado, dijo que había colocado elementos de seguridad suficientes para detectar estos intentos. A la vez, recomienda comunicarse directamente con la compañía para resolver cualquier incidente.
Por otro lado, es lógico que las compañías no quieran dejar su destino en las manos de una marca externa. En este sentido, una forma de defenderse de estos ataques de publicidad es al tener software de protección instalado en los servidores. Hay soluciones que le permiten a las marcas filtrar el tráfico no-auténtico que quiera saturar la página y crear problemas de ese tipo. También es recomendable contar con un buen experto de ciberseguridad dentro del negocio.