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Según Corona, su campaña ha logrado limpiar casi cuatro millones de metros cuadrados de playas
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Para 2010, la basura plástica generada en todo el mundo superó a la producción de plástico en cinco millones de toneladas
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China es el país que más contribuye a la polución de los mares, mientras que la empresa más dañina en el tema es Coca-Cola
Individuos, compañías, organizaciones y gobiernos contribuyen a la contaminación en varios entornos. Líquidos, gases y productos sólidos constantemente se están botando por aire, mar y tierra a diestra y siniestra. Pero uno de los elementos más dañinos es el plástico. Según Our World in Data, ya desde 2010 se producían 275 millones de toneladas de desechos plásticos anualmente. La nueva campaña de Corona quiere impedir que escale más este problema.
Pero sus métodos podrían no ser los más convencionales. En un comunicado, la cervecera anunció una nueva campaña global. A través de esta iniciativa, Corona colocará máquinas expendedoras en varias locaciones turísticas costeras en España, Italia, América Latina y El Caribe. Los usuarios podrán llevar desechos plásticos a estas locaciones y “comprar” cerveza. El proyecto lo hace con la organización Parley for the Oceans, con quien ha colaborado antes.
La compañía lanzó además un six-pack edición limitada. Corona se comprometió a que, por cada compra, limpiará un metro cuadrado de playa junto con Parley. Estas iniciativas son parte de la campaña Protect Paradise, enfocada a retirar basura plástica de los mares en sitios turísticos. La compañía de cerveza también lanzó un spot con motivo del Oceans Week 2019, donde invita al público a luchar contra el reto de la contaminación en los mares.
Campaña por el medio ambiente
Esta cervecera no es, ni de casualidad, la primer empresa u organización que toca el tema de la contaminación. Históricamente varios proyectos han tocado varios aspectos de la temática. Entre las más relevantes están la iniciativa de Pantone y Adobe para salvar los corales. La empresa Dreampack liberó en mayo una campaña también sobre el plástico en los océanos. Y en general, todas las marcas deberían tener el medio ambiente en mente.
Resulta interesante el acercamiento de esta campaña. Gracias a que se trata de una iniciativa con varias implementaciones, es más probable que genere interacción con el público objetivo. A las personas más proactivas se les ha invitado a limpiar playas directamente. Para los individuos más pasivos, está la opción de simplemente comprar la edición especial. Y para quienes muestran desidia ante el problema, ofrece productos gratuitos a cambio de basura.
La implementación es buena y parece efectiva, considerando sus resultados. Pero tal vez se trata de una campaña muy limitada. Los esfuerzos de Corona se limitan a las zonas turísticas costeras de alto tránsito. Por supuesto, es donde suele acumularse la mayor cantidad de basura. A la vez, hay otras zonas donde la acumulación de contaminantes marinos es un gran problema. Eso sin mencionar, por supuesto, que este tipo de esfuerzos podrían ser inútiles.
Si bien los esfuerzos de Corona son importantes y se debe seguir dando prioridad a la difusión del problema, tal vez sería más efectiva (en términos de beneficio al medio ambiente) una campaña dirigida hacia las fuentes del problema.