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La carrera por encontrar agua lunar acaba de comenzar, y esta misión podría ser el primer paso hacia un futuro interplanetario.
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El descubrimiento de agua en la Luna no solo tendría un impacto en la ciencia lunar, sino que podría facilitar la colonización y exploración del espacio profundo, incluyendo futuros viajes a Marte.
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Nokia no solo está involucrada en el desarrollo de la infraestructura de comunicaciones, sino que también está demostrando su iniciativa en el sector espacial.
En una audaz colaboración, Nokia e Intuitive Machines están liderando una misión lunar que podría desvelar uno de los secretos más codiciados del espacio: el agua en la Luna. Este descubrimiento podría abrir la puerta a nuevas posibilidades para la exploración del Sistema Solar, desde la creación de combustible hasta la posibilidad de cultivar en un ambiente extraterrestre.
Y es que hemos sido testigos de que en las últimas décadas, las grandes marcas han comenzado a redirigir sus esfuerzos hacia la investigación y el desarrollo de tecnologías que no solo impactan la vida cotidiana de los consumidores, sino que también se aventuran más allá de la Tierra. Este fenómeno se ha intensificado con el creciente interés de las empresas tecnológicas en la exploración espacial, un campo que anteriormente estaba dominado por agencias gubernamentales como la NASA y la ESA (Agencia Espacial Europea).
Grandes nombres como SpaceX, Blue Origin (fundada por Jeff Bezos), y Virgin Galactic han sido pioneros en llevar la exploración espacial al ámbito privado. SpaceX, por ejemplo, no solo ha avanzado en el desarrollo de cohetes reutilizables, sino que también está liderando la misión de enviar humanos a Marte y más allá. Su enfoque ha abierto la puerta para que otras empresas tecnológicas se interesen en el espacio como un área viable de innovación.
Las motivaciones detrás de la expansión de grandes marcas hacia la investigación espacial son múltiples. Una de las razones es la innovación tecnológica. Las condiciones extremas del espacio exigen avances en áreas como la robótica, la inteligencia artificial, las telecomunicaciones y la biotecnología.
Además, las grandes marcas han comenzado a entender que asociarse con la exploración espacial es una manera de posicionarse como líderes en innovación y tecnología avanzada. Las colaboraciones con agencias espaciales o la participación en proyectos espaciales pueden aportar un gran valor a la imagen de una empresa.
No obstante, como era de esperarse, Estados Unidos es el país que lidera en las inversiones de este sector y es que mucho tiene que ver que haya sido el primero en llegar a la luna. Apolo 11 fue la quinta misión tripulada del Programa Apolo de los Estados Unidos. Dicha nave se envió al espacio el 16 de julio de 1969, para ello se realizó su alunizaje el 20 de julio de ese mismo año y al día siguiente dos astronautas (Armstrong y Aldrin) se convirtieron en los primeros en caminar sobre la superficie lunar.
Estados Unidos lidera la lista con alrededor de 46,2 millones de dólares, posteriormente se encuentra China con una inversión de 29, 3 millones de dólares, el tercer puesto lo ocupa otro país asiático que es Singapur que puso a juego 5,1 millones de dólares.
Nokia se une con Intuitive Machines para buscar agua en la luna
Nokia y Intuitive Machines han anunciado su colaboración en una misión lunar crucial para la exploración espacial. La emblemática marca tecnológica compartió en sus redes sociales: “¡Estamos explorando la Luna con @IntuitiveMachines!”, destacando la importancia del agua en este proyecto. En un comunicado conjunto, ambas compañías explicaron el impacto de esta misión, señalando que el hallazgo de agua en la Luna podría revolucionar la exploración del Sistema Solar, proporcionando recursos vitales para futuras misiones espaciales.
“Es fácil imaginar a los astronautas explorando la Luna en un vehículo explorador con un Micro-Nova Hopper en el asiento trasero”, dijo Thierry E. Klein, presidente de Bell Labs Solutions Research en Nokia. “Cuando encuentren un cráter adecuado, los astronautas enviarán el Hopper al fondo para buscar hielo. En ese caso, la red proporcionará los enlaces inalámbricos que conectan el Hopper con el vehículo explorador, conectan el vehículo explorador con la base lunar y conectan los trajes espaciales de los astronautas entre sí y con la base lunar”, se lee en el comunicado.
El agua lunar no solo podría convertirse en una fuente de agua potable para astronautas, sino que también abriría la posibilidad de generar oxígeno para respirar e hidrógeno para combustible, vital para los viajes espaciales, incluyendo una eventual expedición a Marte. Aunque los escaneos orbitales han identificado la presencia de agua en la superficie lunar, su ubicación y forma exactas siguen siendo un misterio.
La misión IM-2, que será lanzada a finales de febrero, tiene como objetivo explorar el polo sur lunar, área clave en la búsqueda de agua. Esta misión es parte de la iniciativa Commercial Lunar Payload Services (CLPS) de la NASA, con la que se realizarán varios experimentos científicos antes de las misiones tripuladas bajo el programa Artemis. IM-2 también probará tecnologías pioneras bajo la iniciativa Tipping Point de la NASA, con un enfoque específico en la infraestructura lunar para la extracción de agua.
La clave de esta misión será el módulo de aterrizaje lunar Athena, que llevará en su interior la Micro-Nova, un dispositivo diseñado por Nokia Bell Labs, junto con el Sistema de Comunicaciones de Superficie Lunar (LSCS), que establecerá una red de conectividad en la Luna. Esta tecnología permitirá a los controladores de la misión enviar comandos a la Micro-Nova, realizando un recorrido a través de la superficie lunar que culminará en un cráter. El propósito de este viaje es recolectar datos clave sobre las condiciones para la presencia de agua en la Luna.
We’re exploring the moon with @IntuitiveMachines! Water is a key element of the Mission. Here’s why : https://t.co/6jFe9F8rUe#SpaceTech #CellularNetwork #IM2 @belllabs pic.twitter.com/rfcuvZx68O
— Nokia (@nokia) January 31, 2025
Micro-Nova estará equipada con dos instrumentos científicos esenciales. Primero, un pirómetro desarrollado por el Centro Aeroespacial Alemán, que medirá las temperaturas en el cráter para determinar si son adecuadas para la conservación del hielo de agua. En segundo lugar, un espectrómetro de neutrones de Puli Space Technologies, que detectará el hidrógeno en la superficie lunar. La presencia de hidrógeno podría ser un indicio de agua. Si los instrumentos registran condiciones propicias para el agua, la misión continuará recolectando datos mediante sensores e imágenes que serán transmitidos a la Tierra a través de la red de Nokia.
Con esta misión, Nokia y Intuitive Machines no solo están dando un paso hacia el avance de la tecnología espacial, sino también acercándose a un descubrimiento que podría cambiar el futuro de la exploración lunar y más allá.
