Calladitas, muy calladitas y con bajo perfil, las marcas de desinfectantes saben cómo vender como nunca desde hace dos meses ¿Suerte o justicia? Esto es un dilema, pero el fenómeno me interesa mucho y me encanta observar sus redes sociales, su publicidad y cómo se comunican todos los días. Desde hace más de dos meses, Grupo Alen, grupo mexicano de limpiadores y desinfectantes como Cloralex “El rendidor” y Pinol, sin hacer mucho escándalo están facturando millones de dólares cada semana. No pueden apaciguar la demanda de sus productos que combaten y desinfectan al virus que provoca la enfermedad de COVID 19. Estas marcas, serán de las pocas de consumo que se mantendrán muy fuertes, sólidas y poderosas después de esta crisis de salud y de economía que dejará a muchos muertos o casi muertos. En una pandemia que dejará con mucha probabilidad más empresas y marcas muertas que pacientes al rededor de todo el mundo ¿Y qué me dicen de Lysol? Pasó en días de ser un producto de consumo masivo a un artículo premium y de lujo? Ay estos fabricantes, que siga su suerte y que consoliden sus ADN´s de marca pero que nunca se olviden de Quines los llevaron ahí. Gratitud al cliente.
Interesante lo que pasa porque, en estos días, están vendiendo como locos, quizá con una retroalimentación objetiva del manejo de la comunicación comunitaria de sus marcas que espero escuchen con atención. Qué gusto que vendan mucho, pero y qué pasa con retribuirle a la comunidad lo que está pasando. El silencio y el bajo perfil no bastan, ¿Por qué no iniciar un diálogo activo con la población asustada por la incertidumbre y la enfermedad? ¿Por qué no invertir en ayudar en un su bonanza a sus millones de clientes en este momento? ¿Acaso están muy ocupados en sólo vender? ¿Qué se les acabó la sensibilidad? Interesante, en mi punto de vista aquí hay algo importante que trabajar y un área de oportunidad importante que descubrir. Atentos. Su bonanza en estos días es su fortaleza de marca por siempre. Y la reciprocidad no es un gasto, es una inversión.
En cuanto a los retailers, los supermercados están al tope. Muchos clientes si en algo han gastado en los tiempos de confinamiento, es en hacer el súper he incrementar la despensa, lo que les da un sentido de seguridad para sobrevivir estos tiempos oscuros ¿Qué hacer para vender y al mismo tiempo retribuir las altas ventas y los grandes volúmenes de transacciones? Habría que pensar una forma de seguir siendo productivos y al mismo tiempo agradecer. Ayudar a que la economía de los países se reconstruya. Porque al mismo tiempo, el bienestar de sus clientes será el futuro de sus ventas y que las misiones de compra dependerán en un futuro de la memoria de los clientes. Porque parecería que los clientes olvidan fácil, pero la realidad es que recordarán siempre a quiénes los ayudaron en estos tiempos complejos.
Las marcas que facilitan la comunicación y el networking digital para lograr objetivos y metas de grupo también tienen más uso que nunca. Todo el mundo se va a reunir a distancia para el tele trabajo o el Home office porque hay mucha hambre de seguir siendo productivo a pesar de estar encerrados en casa. Son tiempos dark y descubrimos que para reunirnos muchas veces ya no es necesario estar de frente y desperdiciar dinero en transportarse. Esto genera ahorros y hace que las reuniones de trabajo sea más productivas y con mejor enfoque en resultados por tiempo invertido. Si algún día regresamos a la calle después de esta guerra sanitario-social-comercial mundial. Ya nos dimos cuenta que las reuniones a distancia sí pueden ser efectivas. Que las oficinas muchas veces son de ornato. La forma de trabajar nos cambió. Y esta enfermedad sacó demonios pero también otro tiempo de reinversión y otra forma productividad.