No hay duda que Nintendo encontró en el marketing de nostalgia un poderoso recurso para impulsar sus ventas en el último año y todo indica que no piensa olvidarse pronto de este potencial.
La compañía japonesa pasaba épocas muy difíciles, incluso con pérdidas (en 2012 y 2014), pero los pronósticos son positivos, antes que cierre el año fiscal 2017 se tenían estimaciones que sus ingresos ascienden a 915 millones de dólares, nada mal considerando que en 2016 reportaron apenas 146 millones y un año antes 348 millones, de acuerdo con cifras proyectas en Statista.
La razón de esta recuperación es que Nintendo comenzó a lanzar productos que apelan mucho a la nostalgia, aunque con una clave, hacerlo confiando en sus consolas que generaron un vínculo profundo con los fans. Así primero lanzó su emblemática NES Classic Mini, que la catapultara a la fama internacional en la década de los ochenta.
Después, la Gran N hizo caso a los fans haciendo válidos los rumores y recientemente lanzó la SNES Classic Edition. La euforia para amabas consolas fue tal que se agotaron a poco de que salieran al mercado.
De hecho, pese a que Nintendo promete que la SNES tendrá un abasto suficiente, aún hay gamers que se quedaron con las ganas de conseguir una de estas consolas llenas de nostalgia y juegos icónicos. No nos olvidamos del impacto de Nintendo Switch, pero las consolas retro le han funcionado bastante bien.
We’ll also bring the Nintendo Classic Mini: NES back to Europe next summer. More info will be shared in the future ► https://t.co/YUY2dxzI50 pic.twitter.com/RcIxPKlil7
— Nintendo of Europe (@NintendoEurope) 12 de septiembre de 2017
Bueno, ahora, vuelve a escuchar a sus consumidores al traer al mercado americano versión de la New Nintendo 3DS XL, una consola portátil que tiene un diseño inspirado en el Super Nintendo.
Al parecer todo forma parte de una estrategia de marketing conjunta con Amazon, pues se lanzó la preventa a través del gigante del comercio electrónico, pues quienes no puedan apartar una tendrán que esperar al 27 de noviembre que es la salida oficial a tiendas.
La apuesta de la Gran N será llegar a ese mercado al que tuvo acceso la Nintendo 3DS XL, lanzada al mercado en 2011 y que culminó una serie de consolas portátiles (2DS XL, 2DS, y DS). Esta miniconsola alcanzó las 65 millones de unidades vendidas, de acuerdo con datos de VGChartz.