No hace mucho que NINCH llegó a México, en un evento donde el diseño, la música, el arte y tecnología, en conjunto, formaron parte del propios discurso de la agencia.
Estamos ya sumergidos en una era en la que estar conectado a la web o a las redes sociales parece algo más que, incluso, una necesidad; es una herramienta elemental para estar al tanto de todo lo que acontece en el mundo.
Datos del informe Digital 2022, firmado por We Are Social y Hootsuite revelan que, actualmente, hay cerca de cinco mil millones de internautas, de los cuales 4.6 mil millones cuentan, por lo menos, con una red social a la que están adscritos.
La era poscovid llega con grandes retos a nivel personal, luego de un periodo en el que, la duda, la reflexión y, sobre todo, la incertidumbre fueron parte de la narrativa en los medios de comunicación, en las redes sociales y en cualquier escenario que involucrara el contacto con otras personas.
El lado humano es, quizá, lo que más costará recobrar en un contexto en el que, todos los días, escuchamos y leemos sobre temas como eCommerce, pulso digital, marketing digital y otros más intrincados como metaverso, realidad virtual, etcétera.
Y es que, en ese sentido, la apuesta a futuro para algunas agencias está en el plano digital, donde, incluso, hay aquellas que ya están empezando a tener sus estrategias en aras de llegar a esa nueva audiencia que llegó, irremediablemente, con la pandemia.
No obstante, para NINCH, la apuesta está más enfocada en aquello que se perdió por un largo periodo: el contacto humano y, sobre todo, la comunicación en su sentido más original.
“La comunicación no es solamente publicidad y relaciones públicas, es también contenido, diseño, música, arte, tecnología. La comunicación debe ser entendida como un todo en movimiento continuo”, menciona Noelia Chessari, CEO de NINCH.
Se trata, en cierto modo y en palabras de Chessari, de volver a los orígenes, lo cual, en su opinión, es uno de los grandes retos para las agencias de cara a la era pospandémica que, de acuerdo con varias voces de la industria, ya estamos viviendo.
En ese sentido, hablamos de un escenario en el que el mensaje, según lo que explica la CEO de NINCH, es, en esencia, lo más importante; comunicar las ideas y, con ello, volver a ese lado humano que, finalmente, es parte de la vida cotidiana de las consumidoras y consumidores, y de las personas en general.
Luego de 11 años, finalmente, NINCH decide dar un paso adelante con su llegada a México, hecho que, de viva voz de Noe Chessari, se trata de una iniciativa para “inspirar a la nueva generación de comunicadores a romper paradigmas y desafiar los límites, con el fin de dar un paso adelante y evolucionar, transformando la comunicación tradicional en un mundo que se ha volcado a la era digital”.
De esta manera, hoy hablamos de un momento en el que los temas de inclusión y la igualdad de género se han convertido en parte del lenguaje universal, al cual, incluso, las agencias y las marcas también se están sumando.
Más que una estrategia, la idea se inclina más hacia el mensaje, donde con innovación y creatividad se busca llegar a esas audiencias que siguen marcando la pauta a seguir en temas de suma relevancia para una sociedad que exige una mayor representación.
Para NINCH, en ese aspecto, no hay vuelta hacia atrás; el presente y el futuro se construyen desde una narrativa en la que lo primordial es no olvidar que, ante todo, el consumidor es un ser humano, el cual se adscribe a cientos de ideas y ciertas ideologías que marcan sus propios hábitos.
Hoy, en pleno 2022, NINCH llega de la mano de clientes como Adidas, Mercado Libre, Calidra y Grupo L’Oréal, con quienes busca colocar ese mensaje de innovación en un tiempo que exige, precisamente, creatividad y, sobre todo, inclusión que, de entrada, esto ya viene a romper paradigmas.
“En 11 años, no sólo hemos plasmado nuestro sello de ‘cultura Nincha’ en cada proyecto desarrollado para nuestros clientes, sino que hemos creado una cultura que nos mantiene en continuo movimiento, buscando nuevos desafíos”, menciona Noelia Chessari.
El mensaje hacia el futuro es claro: se trata de un momento de cambio y de evolución. Alejandro Jodorowsky, escritor, actor, cineasta, psicomago y un largo etcétera, lo define bien: “Si tú detienes el tiempo, se acaba el cambio”.