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Además, cinco de las series en el streaming de Apple ya están aprobadas para una segunda temporada
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Las estrellas de sus proyectos afirman que lo único que tienen como referencia son los comentarios positivos de la marca
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Durante la última rueda de la Television Critics Association, la empresa no envió a ningún ejecutivo para preguntas de prensa
Todas las empresas de la industria del streaming han tenido sus pequeñas mini-victorias. Esta mañana, Netflix anunció que agregaría las películas de Studio Ghibli a su biblioteca. Por su lado, Disney+ parece estar afectando seriamente el modelo de negocio de la líder del sector. En cambio, es claro que Prime Video le está subiendo la apuesta a los mercados de América del Sur. Y tanto Hulu como Peacock tienen ambiciosos planes para su modelo ad-supported.
Medir el éxito del streaming puede ser algo bastante complejo. De acuerdo con Broadcasting + Cable, para triunfar en el mercado se necesita una combinación de varios indicadores. Vox, por su parte, apunta que, a futuro, la mayor señal de triunfo será la capacidad de aliarse con otros proveedores para incrementar el atractivo para los clientes. Por su lado, Newsy cree que también hay un cierto factor de buena suerte y timing mezclado en el fondo de la fórmula.
Pero para la gran mayoría de los agentes, que quieren una indicación inmediata cómo avanzan estos proyectos, hay cifras concretas que se pueden observar. Por ejemplo, ganancias netas a lo largo de un cierto periodo de tiempo. O bien, número de suscriptores (y cómo cambia esta cifra con el tiempo). El problema es que mucha de esta numeralia está fuera del alcance de las mismas plataformas de streaming. Sin datos de primera mano, es difícil estimar la situación.
Nadie sabe cómo le va al streaming Apple TV+
Justo ésta es la situación en la que se encuentra la plataforma de Tim Cook. De acuerdo con Adweek, ni siquiera los socios más cercanos a la compañía tienen una claridad sobre cómo le está yendo al proyecto de streaming. Lo anterior incluye a estrellas como Jennifer Anniston y Resse Witherspoon, que protagonizaron la primera temporada de The Morning Show. Ambas apuntan que, fuera de los comentarios de los directivos, no saben si el programa fue un éxito.
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Pero esto no ha impedido que Apple TV+ le apueste con fuerza incluso a aquellas series que el público no ha tenido la oportunidad de probar. De acuerdo con Adweek, Tim Cook y su equipo ya pidieron la segunda temporada de las series Mythic Quest: Raven’s Banquet y Home Before Dark. Sin embargo, estos shows no llegarán a los suscriptores del streaming sino hasta febrero y marzo, respectivamente. Una decisión curiosa por cómo se recibieron sus primeras series.
¿Qué tienen en mente Tim Cook y compañía?
Las compañías de la industria del streaming no son ajenas a invertir grandes cantidades de dinero en hacer crecer sus proyectos. Apple, antes de lanzar su plataforma al público, estaba gastando varios millones de dólares en súper-producciones de alto calibre. Netflix, por su parte, rescató un cine histórico en Los Ángeles para reforzar su posición entre las altas esferas de Hollywood. Por su parte, Disney desembolsó también mucho para tomar control de Hulu.
Pero las últimas acciones de Apple resultan interesantes. Desde siempre la marca ha cuidado que sus cifras se mantengan más o menos ocultas en prácticamente todos los aspectos. En este sentido, solo libera a lo que está obligada como compañía pública. Sin embargo, la marca recién entró al mercado del streaming. Un sector donde alardear el éxito es parte de la guerra. Así que el que se rehúse a dar los números de su plataforma solo podría indicador dos cosas.
Uno, que los resultados de la compañía en streaming son mucho peores de los que nadie se imagina. Revelar ahora que casi nadie consume sus contenidos podría deteriorar la confianza de inversores y cineastas, poniendo una barrera a sus planes a futuro. O bien, sus resultados son o justos los que esperaba o han superado todas sus proyecciones. En este caso, guardar la información solo para sí permitiría a Apple no llamar la atención de sus brutales rivales.