Después de las fiestas de fin de año, este viernes arrancó la Liga MX Clausura 2020, torneo que se traduce en un gran número de partidos y transmisiones de futbol que para las marcas representan una venta interesante para conectar con sus consumidores a través de la pasión por este deporte.
Históricamente, México se ha ubicado como un mercado en el que la pasión expresada por los fanáticos del balompié es un negocio de muchos ceros que más de una marca han intentado capitalizar.
El negocio del futbol
Hasta el 2018, un análisis de AS, indicaba que, por ejemplo, la suma total de asistentes en cada estadio de la Liga MX, partido a partido, fue de 9 millones 497 mil 725 en 418 partidos que disputaron los clubes de Primera División en la Liga MX y Copa MX, con un promedio general de 22 mil 722. A esto se suma la cantidad de patrocinadores que absorbe dicho deporte. La misma fuente destaca que cuando los patrocinios se leen por liga, la Liga MX se mantiene a la cabeza con 153 sponsors, seguida de la LMB (126), Ascenso MX (120) y la Liga Mexicana del Pacífico (59).
En el terreno de las camisetas y demás productos relacionados, no cabe duda que Adidas y Nike han encontrado una forma de hacer crecer sus arcas; sin embargo, en este nuevo torneo que comenzó el viernes pasado, estas dos firmas no son las que comandan la presencia en la cancha.
Marca nacionales se coronan
Este torneo contará con la presencia de 18 escudaras deportivas, mismas que si son seleccionadas por la marca que viste a sus jugadores 5 comparten al mismo patrocinador.
De esta manera, Pachuca, Queretaro, Tijuana, Necaxa y Santos coronar a la marca nacional Charly como la marca deportiva que lidera la vestimenta de los equipos participantes, dejando a Pirma -también firma nacional- en segundo lugar con tres equipos es su portafolio: Morelia, León y Atlético San Luis.
Con esto, las rimas multinacionales nacionales quedan a la mitad de la tabla con apenas dos equipos por firma dentro del campo: Nike (América y Pumas); Adidas (Atlas y Tigres) y Puma (Guadalajara y Monterrey).
El final de la lista es para marcas como Under Armour, Joma, Umbro y Carrara que se quedan con un sólo equipo: Toluca, Cruz Azul, Puebla y Juarez respectivamente.
Este escenario tiene dos lecturas claras. Por un lado es un partido ganado para las marcas nacionales que han sabido capitalizar su condición de locales para dominar en la cancha.
Por otra parte, para las marcas transnacionales no todo esta perdido. Si bien se quedan con una cuota menor de equipos, en sus filas se queda con aquellos que tienen el volumen de afición más grande lo que se traduce en venta de productos y playeras.
