Netflix presentó el reporte financiero correspondiente al tercer trimestre del año, mismo que rompió con todos los pronósticos de los analistas de Wall Street, tanto en suscripciones como en ingresos, algo que provocó que sus acciones se fueran a las nubes.
La compañía de Los Gatos, California venía de un segundo trimestre que no convención, sobre todos en lo que respecta a la suma de usuarios, algo que cambió de tono con las más recientes cifras publicadas.
Y, es que Netflix informó que sumó alrededor de 7 millones de nuevos suscriptores, pasando de 130 a 130 millones a nivel global; 5.87 millones provenientes de mercados internacionales, por 1.09 millones dentro de Estados Unidos.
Esto rompe los pronósticos por 1.8 millones, ya que los analistas anticipaban el incremento de 5 millones de nuevos suscriptores; apenas 650 mil en Estados Unidos y 4.35 millones en mercados internacionales.
Pero, lo significativo fue en sus ingresos, la firma reportó un beneficio neto de 403 millones de dólares, o 89 centavos por acción (los analistas esperaban 68 centavos por acción), algo que bate cualquier expectativa pues es casi el triple de lo reportado entre julio y septiembre de 2017, cuando reportó 130 millones de dólares.
12 por ciento
Los resultados tuvieron un impacto casi inmediato, las acciones de Netflix se dispararon en la Bolsa de Valores de Nueva York, luego de dar el informe brincaron hasta 12 por ciento en el índice NADAQ, hasta los 346.40 dólares por papel.
Contenido y marketing parte de la culpa
No, no se trata de los contenidos que sumó a su catálogo en las últimas semanas, hablamos de la gran cantidad de horas que sumó alrededor de 676 horas de programación original, según un reciente informe de la firma de Wall Street Cowen & Co., esto sin considerar las licencias de distribución.
Entre los estrenos originales en este periodo se destacaron Orange is the New Black, BoJack Horseman, o licencias como La casa de papel, Thor: Ragnarok (en Estados Unidos), sólo por citar algunas.
En esto hay que reconocer el plan de marketing que Netflix imprime en muchas de las producciones, como en su momento fue con Stranger Things, por ejemplo. Su trabajo se reflejó en aspecto como los Emmy, donde ya se equiparó con HBO.
