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Netflix se ha dado a conocer como uno de los jugadores clave en el mercado de streaming, precursora de esta poderosa industria.
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La llegada de Disney Plus y otros jugadores con formatos como los que incluyen publicidad han minado la suerte de Netflix en el negocio.
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Netflix ha sido un negocio de gran relevancia en la industria de streaming y su capacidad ha sido fundamental en el mercado de contenidos.
Las alarmas han sonado al interior de Netflix y dentro de las oficinas se ha lanzado la peor advertencia desde que la plataforma se convirtió en uno de los negocios precursores del streaming. La pérdida de suscriptores ya obligó a la marca replantear su negocio y acceder a un plan de emergencia.
Todo esto ocurre mientras se pierde la confianza en la “promesa” que la app daba como negocio y en la capacidad de crecimiento que se he la visto minada, por lo que su actuación de emergencia se vuelve clave.
Indudablemente estamos ante un giro en la industria que está por darse y los golpes sobre la mesa serán contundentes para replantear la forma en que se ha venido haciendo streaming en la actualidad.
El plan de Netflix
Depurar a usuarios que comparten sus contraseñas, permitir publicidad en su plataforma y nuevas tarifas económicas son algunas de las opciones que figuran en el plan de emergencia, cuyo cristal de “rómpase en caso de pérdida de usaurios” ha sido reventado.
Todo esto ocurre tras darse a conocer que Netflix perdió 200 mil suscriptores en lo que va de 2022, por lo que el fuerte descalabro ya tiene consecuencias que invariablemente comenzará a tomar medidas entre los usuarios que hacen mal uso de sus perfiles y comparten contraseñas.
La plataforma hizo un primer adelanto en el que advirtió que en más de 100 millones de hogares en el mundo se comparte la contraseña de usuarios inscritos a la pataforma.
Dentro de Estados Unidos y Canadá, que son los mercados más significativos para la plataforma, el negocio se ve impactado por 30 millones de hogares (de los 100 estimados).
El problema del mal uso en contraseñas ha sido un problema identificado por Netflix, sin embargo, hasta ahora no había tomado la decisión tajante de enfrentarlo, porque no había representado un problema, debido a que mantenía un crecimiento en usuarios registrados.
La realidad ya es otra para la marca y bajo este enfoque, la decisión tiene que ser contundente para plantar cara a Disney, Warner, Apple, NBC y Paramount, que han afectado el negocio de la empresa más famosa de Gatos, California.
“La práctica de compartir cuentas, en el porcentaje de nuestras membresías de paga no ha cambiado mucho a lo largo de los años, pero, su impacto dificulta el poder aumentar la membresía en muchos mercados, un problema que ensombreció nuestro crecimiento durante la contingencia”, explicó la plataforma en medio de este maremoto que se ha levantado.
Junto a estas decisiones, el propio CEO de Netflix, Reed Hatings, se dijo dispuesto a experimentar nuevos modelos para generar ingresos en la plataforma, por lo que aceptó que tras años de negarse a experimentar estos formatos, ahora estaba abierto a permitir modelos de suscripción basados en publicidad o en precios asequibles, para darle opciones a sus suscriptores.
““Aquellos que han seguido a Netflix saben que he estado en contra de la complejidad que supone la suscripción con publicidad y soy un gran admirador de la simplicidad de la suscripción.
Por mucho que sea un fan de este modelo, soy un fan más grande de la libre elección a la que tiene derecho el consumidor y permitirles elegir a quienes les gustaría tener un precio más bajo y toleran la publicidad obtengan lo que quieren, esto tiene mucho sentido”, acotó.