Con la llegada del nuevo gobierno federal mexicano causó mucha expectativa la relación que el presidente Andrés Manuel López Obrador guardaría con el sector privado y el empresariado mexicano.
Una de las reacciones primeras marcas que han mostrado apertura hacia el gobierno y disposición para invertir en nuestro país es la compañía transnacional de origen suizo Neslté que ha anunciado la construcción de una planta procesadora de café en el estado de Veracruz.
Se trata de una inversión de 154 millones de dólares y anuncio de inversión fue hecho durante una reunión con el Andrés Manuel López Obrador. Se prevé que con la instalación de esta planta se generen unos 10 mil empleos directos, indirectos y en la obra en palabras de Fausto Costa, presidente ejecutivo de Nestlé.
Durante meses y años se especuló acerca de la relación que existía entre AMLO y los empresarios y este anuncio conjunto entre Nestlé y el gobierno de México ayudaría a apaciguar los ánimos y contrarrestar las opiniones que ven al la nueva administración federal como un peligro para la permanencia de algunos de los grandes capitales privados en nuestro país.
Los hechos ocurren después de otro acercamiento entre AMLO y los empresarios, representados por el dirigente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, durante el acuerdo para aumentar el salario mínimo a partir del 1 de enero.
En realidad, la noticia de Nestlé no es nueva, toda vez que desde que se dio a conocer la noticia apenas se revelaron los resultados de la elección que le otorgó a López Obrador la mayoría de los votos en la elección presidencial de mediados de este año -lee mayor información a través de esta liga.
Ya se verá con los días, meses y años, si el sector empresarial mexicano y las marcas de consumo siguen teniendo acercamientos con el nuevo gobierno federal.
