El flamante CEO de Twitter, Elon Musk, quiere mostrar cambios en la red social de forma inmediata. El objetivo es dar un golpe de marketing de impacto que evite que los anunciantes y usuarios se vayan.
Así, por un lado, les pidió a los actuales empleados que rediseñen el sistema de suscripción y verificación “en una semana”.
Por otro lado, trasladó a 50 ingenieros en software que trabajan en Autopilot y en Tesla a llevar adelante la revisión del código de la red social.
Según CNBC, los trabajadores de Twitter dicen que los gerentes les exigen que trabajen en turnos de 12 horas, los siete días a la semana, para cumplir con el agresivo nuevo plan de Musk.
Musk, que también es director del fabricante de cohetes SpaceX, finalizó la compra de Twitter el viernes 28 de octubre por 44.000 millones de dólares, tal como lo había pactado en abril, aunque luego se arrepintió.
La presión de Twitter y de la Justicia terminó por convencerlo.
De inmediato, Musk despidió a los máximos ejecutivos de la red, entre ellos, el CEO, el CFO y la jefa de legales, y disolvió la junta directiva.
Musk lleva empleados de Tesla a trabajar a Twitter
Además de los cerca de 50 empleados de Tesla, Musk llevó a Twitter a dos ingenieros de Boring Company (la empresa que construye túneles subterráneos) y uno de Neuralink (que trabaja en el desarrollo de cerebros artificiales).
También dos familiares que estuvieron trabajando en Palantir y Neuralink, James y Andrew Musk.
Según CNBC, entre los empleados de Tesla llevados a Twitter figuran el director de desarrollo de software Ashok Elluswamy, el jefe de ingeniería del sistema de piloto automático Milan Kovac, el director de ingeniería de software Maha Virduhagiri, el gerente de programas técnicos de personal Pete Scheutzow, y Jake Nocon, de la unidad de vigilancia interna de Tesla.
Nocon es un especialista en identificar amenazas internas y monitorear a los críticos dentro de las compañías. Antes de llegar a Tesla, había trabajado en el mismo puesto para Uber.
De acuerdo con el medio estadounidense, los nuevos empleados están presionados para aprender lo más rápido posible desde el código fuente hasta las estrategias de moderación del contenido y las formas que se usan para mantener la privacidad de los datos. La idea es rediseñar la plataforma.
Aunque Musk se había calificado como un “absolutista de la libertad de expresión”, lo cierto es que hay leyes que debe cumplir y acuerdos comerciales.
Es por eso que el viernes, luego de adquirir Twitter, en una carta abierta a los anunciantes les dijo: “Obviamente, Twitter no puede convertirse en un infierno de todos contra todos, donde se puede decir cualquier cosa sin consecuencias”.
Mientras tanto, los empleados de Twitter dijeron que aún no han recibido planes específicos de Musk y su equipo, y que no saben nada sobre posibles recortes de personal dentro de sus grupos, presupuestos y estrategias a largo plazo.
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