Internacional.- Nada es más convincente para una marca a la hora de cerrar un patrocinio deportivo que el éxito profesional, pues si bien existen una serie de características que convierten a un atleta en un embajador atractivo (carisma, reconocimiento, trayectoria, etc), ninguna es tan llamativa como el sabor del triunfo, pues es ante éste que los consumidores reaccionan de mejor manera.

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Una clara prueba de lo anterior es el corredor de los Cowboys de Dallas DeMarco Murray, quien ha logrado amarrar un contrato multianual con la compañía Silverleaf Resorts a tan sólo un par de días de haberse convertido en el primer jugador en la historia de la NFL en superar las 100 yardas en cada uno de los primeros 7 partidos de la temporada.

Cabe destacar que aunque el acuerdo de patrocino llega recién implantada la nueva marca, misma que tiene la posibilidad de seguir acrecentando, hace aproximadamente un mes el corredor se convirtió en miembro del club vacacional para el cual fungirá como embajador de marca a partir de ahora.

Pero el éxito no es la única cualidad atractiva que Murray tiene para las marcas, pues también es un jugador sumamente carismático, o al menos ésa es la opinión de cada uno de los compañeros de equipo que conforman su línea ofensiva, y a quienes regalo una iMac con valor de mil 300 dólares.