Tal como indican desde Reuters, este miércoles, la autoridad de salud de Brasil, Anvisa, dio a conocer que murió imm voluntario en una prueba clínica de la vacuna para el nuevo virus de coronavirus que están desarrollando de manera conjunta el laboratorio AstraZeneca y la Universidad de Oxford. Las autoridades han indicado que ya han recibido datos de una investigación del tema.
De la misma manera, y en un comunicado distinto, la Universidad Federal de Sao Paulo, que es la institución encargada de coordinar y apoyar en los ensayos que efe están llevando de esta vacuna en Brasil, indicaron que el voluntario ahora fallecido era de nacionalidad brasileña.
A pesar de esta lamentable pérdida, Anvisa aseguró que las pruebas alrededor de la vacuna para Covid-19 desarrollada por AstraZeneca, se mantendrán en el país latinoamericano.
Antecedentes importantes
Esta noticia llega luego de que en semanas pasadas se suspendieran los ensayos de esta vacuna para evaluar algunos efectos secundario que habría tenido en un paciente.
De acuerdo con Daily Mail, las pruebas para la vacuna se suspendieron en Reino Unido de forma súbita, luego que un paciente presentara una reacción severa. No es claro exactamente qué le sucedió a la persona. Pero se suele calificar un evento como grave cuando requiere hospitalización, o está en riesgo la vida del individuo.
A decir de Stat News, que dio a conocer la información al principio, la reacción severa no sería mortal y se espera que el paciente se recupere del episodio. No se sabe claramente si fue la vacuna o algún otro factor lo que ocasionó este cuadro grave. Tampoco es evidente si fue el gobierno de Reino Unido, AstraZeneca u Oxford quien mandó a detener la fase de pruebas. En ese mismo sentido, no hay datos de la identidad (o condiciones pre-existentes) del individuo.
La marca busca ser transparente
Luego de que este tipo de acontecimientos generaran dudas sobre la manera en la que se están llevando a cabo las pruebas de fármaco respaldado por AstraZeneca, de acuerdo con RT, la farmacéutica acaba de divulgar algunos detalles sobre cómo ha sido la fase tres de pruebas para su vacuna anti-COVID en conjunto con la Universidad de Oxford. Lo anterior, de acuerdo con el New York Times, después de varias críticas de parte de expertos en la industria que han considerado que la marca no estaba siendo transparente. En los papeles, se revela que al menos dos pacientes participantes han desarrollado síntomas neurológicos.
Es incierto si estos incidentes están directamente relacionados con la vacuna de AstraZeneca. Sin embargo, han provocado que la compañía detenga las pruebas de fase tres dos veces, la más reciente a inicios de este mes. Mientras la ronda de investigación ya ha sido reanudada en Reino Unido, Brasil, India y Sudáfrica, todavía está detenida en Estados Unidos (EEUU). Esto, en parte, porque la farmacéutica no comunicó en tiempo y forma los incidentes al gobierno.
¿Vacuna en peligro?
Con estos antecedentes y luego de que se confirmara la muerte de un voluntario, para AstraZeneca era vital aclarar los hechos con mayor frecuencia y claridad.
Y es que si bien hablamos de una de las vacunas contra coronavirus más avanzadas, lo cierto es que estos hechos y reportes ponen en duda la seguridad de la vacuna, con lo que aunque sea una de las primeras que esté lista podría generar barreras para ser aceptada en un mercado que aunque reclama una vacuna lo antes posible, busca que esta sea la mejor opción.
Las opciones comienzan a ser mayores, lo que ha hecho más tensa la competencia por ser la primer vacuna en contra de este virus, posición que podría convertirse en un negocio millonario.
Así, es importante mencionar que en semanas recientes Johnson & Johnson se convirtió en la cuarta empresa en comenzar ensayos clínicos a gran escala en la búsqueda de una vacuna para el Covid-19 en Estados Unidos, con lo que se suma a otras marcas como Moderna, Pfizer / BioNTech y AstraZeneca.