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Se estima que, solo en EEUU, la cadena de comida rápida tiene alrededor de 200 locales
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California Pizza Kitchen apunta que la bancarrota le permitirá emerger como “una compañía más fuerte” en el mediano plazo
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Al igual que otras organizaciones comerciales que solicitaron el Capítulo 11, apuntó que la razón principal es la crisis sanitaria
En los últimos meses de pandemia, la situación de los locales de comida rápida no ha sido precisamente positiva. Muchos consumidores han dejado de comprar sus productos, en parte por las restricciones sanitarias y porque muchas compañías no tenían bien estructurados sus sistemas de delivery. Lo anterior ha provocado una verdadera revolución en la industria, con reestructuraciones, cierres y bancarrotas. En éste último, se suma California Pizza Kitchen.
De acuerdo con El Economista, hace unas horas que la marca, al igual que Aeroméxico y otras compañías con operaciones en Estados Unidos (EEUU), se declaró en bancarrota. En concreto pidió resguardo bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de ese país, que facilita a las marcas una reestructuración total de su negocio para poder hacer frente a sus deudas. Como pasó a otros negocios, California Pizza Kitchen se verá forzada a cerrar los locales menos redituables.
No se sabe exactamente cuántos o cuáles de sus cientos de locales, divididos en ocho países, van a salir de operación. Sin embargo, El Economista apunta que la organización tiene deudas valuadas en 400 millones de dólares (mdd). Ya desde 2019, reafirma el medio, que California Pizza Kitchen ya analizaba una venta por el bajo rendimiento de sus locales. Según Univisión, el presidente de la marca, Jim Hyatt, reafirmó su compromiso con el futuro del negocio.
¿Será que California Pizza Kitchen anuncia la muerte de la comida rápida?
No es una exageración decir que el sector de los restaurantes de esta categoría de alimentos están pasando por una pandemia muy difícil. Como California Pizza Kitchen, la subsidiaria más grande de Pizza Hut y Wendy’s en EEUU, NPC International, tuvo que alojarse bajo el Capítulo 11. McDonald’s, aunque lejos de la bancarrota, se desplomó en un 30 por ciento de las ventas. Y agentes como KFC, desde los primeros días de la crisis, tuvieron que cambiar su marketing.
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Pero hay que volver a lo que significa la situación de California Pizza Kitchen para el resto de la industria. Aún con la reapertura de las economías, se siguen revelando casos de graves crisis financieras, cierre de locales y bancarrotas. Ni siquiera las marcas que dominan el mercado han logrado sobrellevar con cierta gracia la pandemia. Aparte, muchos temen que la confianza de los consumidores no se recupere sino a mediano, incluso largo plazo; afectando las ventas.
Lo anterior podría llevar a pensar que se está acercando un apocalipsis, similar al que enfrenta ahora el turismo o el que afecta desde hace años al retail (y recién se agravó con la pandemia). Si bien es cierto que la situación de California Pizza Kitchen y sus rivales de comida rápida es grave, no necesariamente llevará a la desaparición del sector. Pero sí obligará a las marcas a renovar sus estructuras de negocio, ser más eficientes y adoptar prácticas más modernas.
Pandemia: A largo plazo, buenas noticias para la industria
Como sucede ahora con California Pizza Kitchen y sus rivales, varios sectores se están viendo obligados a evolucionar a marchas forzadas por culpa de la pandemia. NBCU, por ejemplo, ha decidido que es hora de cambiar el entorno de la publicidad en televisión. Industrias como la de la moda están aceptando que es necesario adoptar algunas estrategias digitales. Y en el caso de compañías al estilo de Kodak simplemente están cambiando por completo de giro.
Todos estos cambios, en el largo plazo y aunque sean dolorosos para California Pizza Kitchen y rivales, traerán beneficios a todo el entorno de consumo en general. De acuerdo con Bain, al igual que en otras crisis, se podría crear una nueva idea de negocio que trate de dominar al mundo. Según McKinsey, está permitiendo que surjan nuevos líderes, incluso dentro de las mismas compañías. Y en datos de Forbes, está acelerando la llegada del futuro del trabajo.