- Eddie Jordan, figura icónica de la Fórmula 1, falleció a los 76 años.
- Fue el fundador de la escudería Jordan, que compitió en la Fórmula 1 entre 1991 y 2005, y dio la oportunidad de debutar a Michael Schumacher en la categoría.
- La escudería Jordan evolucionó a través de varios dueños y nombres, convirtiéndose finalmente en el actual equipo Aston Martin.
El automovilismo mundial está de luto tras la confirmación del deceso de Eddie Jordan, una figura trascendental de la Fórmula 1 y el hombre que le dio la primera oportunidad en la categoría reina al heptacampeón mundial, Michael Schumacher.
A los 76 años, y después de una lucha de un año contra un cáncer de próstata, el empresario irlandés falleció en Ciudad del Cabo, según lo dio a conocer su familia este jueves 20 de marzo.
La noticia ha provocado una profunda pena en el paddock, donde Jordan continuó siendo una personalidad apreciada incluso después de la venta de la escudería que llevaba su nombre.
Eddie Jordan: una leyenda en la F1
Eddie Jordan fue mucho más que un dueño de equipo; encarnó un personaje singular en el demandante mundo de la Fórmula 1.
Su camino en el automovilismo se inició como piloto de karting, monoplazas y prototipos, pero fue como líder de su propia escudería donde cosechó su mayor reconocimiento.
En 1979 fundó su equipo, compitiendo en campeonatos británicos hasta concretar su ingreso a la Fórmula 1 en 1991 con la fundación de Jordan Grand Prix.
A lo largo de 250 Grandes Premios disputados, su garaje vio pasar a pilotos que dejarían una marca imborrable, siendo el debut de Michael Schumacher uno de los más memorables.
Si bien el alemán fue rápidamente incorporado por Flavio Briatore, la perspicacia de Jordan para identificar talento quedó demostrada.
Desde una perspectiva de mercadotecnia, la marca Jordan en la Fórmula 1 se caracterizó por una imagen dinámica y un espíritu atrevido, frecuentemente descrito como de “rock & roll”.
Esta identidad, aunada a su habilidad para lograr resultados superiores a los esperados, a pesar de manejar recursos limitados en comparación con las escuderías más grandes, generó una conexión especial con los seguidores.
Jordan: cuna de campeones
La valentía de Jordan al brindar oportunidades a jóvenes promesas, como el ya mencionado Schumacher y Damon Hill, no sólo impulsó sus carreras sino que también fortaleció la narrativa de su equipo como un gestor de futuros campeones.
Los cuatro triunfos de Jordan en Grandes Premios –Bélgica 1998 con Damon Hill, Francia e Italia 1999 con Heinz-Harald Frentzen, y Brasil 2003 con Giancarlo Fisichella– ya son parte de la historia.
De Silverstone a Aston Martin
La factoría de Silverstone que albergó a la escudería Jordan es actualmente el núcleo de la Aston Martin en la Fórmula 1.
Después de su venta en 2005 al grupo Midland, el equipo tuvo varias transformaciones, convirtiéndose en Spyker en 2006, luego en Force India en 2008, y finalmente en Racing Point en 2018 para evitar la quiebra.
En 2020, el empresario canadiense Lawrence Stroll adquirió el equipo, renombrándolo poco después como Aston Martin.
Stefano Domenicali, director ejecutivo del campeonato, lamentó su pérdida, recordando su capacidad para “hacer sonreír a la gente” y describiéndolo como un “protagonista único, brillante e inigualable de una era de la F1 al que se extrañará mucho”.
Mike Krack, jefe de equipo de Aston Martin, también rindió homenaje a Jordan, resaltando su papel como fundador y líder carismático cuya visión “sentó las bases” del equipo actual y dejó un “legado”.
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