Por Juan Cárdenas
Twitter: @Desautomatas

Al fin se liberó la herramienta de búsqueda gráfica de Facebook en los Estados Unidos, y tras horas de jugar con ella encuentro dos cosas importantes de mencionar.

Primero, a diferencia de John Sileo, autor del libro “Privacy Means Profit” y experto en seguridad de datos quien dijo a ABC News: “Los phishers,  hackers y ladrones de identidad despertaron con un gran regalo esta Navidad”; yo no creo debamos alarmarnos y cerrar nuestras cuentas o borrar todo tipo de contenido en Facebook, ciertamente y como ellos mismos lo explican, el respetar los ajustes de privacidad de cada usuario fue fundamental para crear y liberar esta herramienta.

Y es que sabemos, este debate viene de hace tiempo y seguirá. Los datos e información que muchos usuarios han compartido fueron de pronto públicos y accesibles para todo el mundo. Más o menos se ha ajustado y Facebook ha crecido y atacado este problema, pero su crecimiento y monetización le exigen una evolución pronta, esta herramienta de búsqueda va enfocada en ello, pues permitirá que el contenido tenga mayor relevancia, más permanencia, más exposición.

Y es muy buena, la verdad se llevaron un acierto con la funcionalidad. No sé si alguna vez intentaron buscar alguna publicación de alguna amistad que recuerdan haber visto hace un par de meses. Imposible. La paciencia requerida para ello era admirable. Ahora con esta nueva búsqueda es mucho más fácil. No es necesario recordar el nombre con el que cierta amistad está registrada, o el nombre exacto de la publicación; como en Google o Yahoo, uno puede hacer una búsqueda algo más especializado.

Pero lo segundo que encuentro importante mencionar, es el uso que cada uno le damos a nuestro Facebook. No sé ustedes, pero entre mi círculo de amigos, conocidos, contactos, etc., varía mucho el nivel de uso que le dan, para algunos es una herramienta más de trabajo, para otros el sitio a donde van a reír o distraerse, o para otros una plataforma para compartir y difundir sus vidas, ideas, actividades, etc. Eso y mil cosas más, y por ello mismo, el nivel de entendimiento que se tiene sobre Facebook, y la actualización que cada una de esas personas tenga varía mucho.

Hay quienes tienen perfectamente organizados sus álbumes de fotos, restringidos algunos para ciertos círculos, o incluso determinadas imágenes. links, apps, conversaciones, etc. Y claro dependiendo siempre de lo que cada uno comparta. Esto toma relevancia con esta herramienta, pues contenido que podría estar casi casi olvidado, hundido en el fondo del time line, hoy puede aparecer en primera posición. Es entonces importante revisar nuestra configuración de seguridad. Borrar lo que no queremos que aparezca, restringir los datos para quien pueda ser pertinente. Organizar nuestros contactos en círculos y calificar los permisos de cada uno de ellos.

Dependerá del caso, esto puede ser algo muy sencillo o una total monserga, pero advertidos están pues la búsqueda como menciono ya existe para los Estados Unidos, lo que significa también que usuarios como yo (o donde poco a poco se vaya abriendo) pueden ya buscar en perfiles de usuarios en México y Latinoamérica, ya sea sólo por chisme, por una serie investigación, o por mera curiosidad. Claro, no todo es malo, con la herramienta usando Facebook recreativamente podemos por ejemplo encontrar muchas actividades y gustos en común, de contactos que no sabíamos los compartían; esa sería una ventaja útil e inocente; pero es justamente cuando algo malo pasa, cuando reaccionamos también mal y arrepentidos. De haber sabido, no es justo, no hay derecho, esto y el otro. Mejor prevenir…

Si ustedes son de los que quieren tener control absoluto sobre quien puede ver qué, corran a verificar todo esté en orden. Las quejas sobre la justicia de la herramienta, sobre su funcionalidad y configuración sobran, porque nadie nos ha obligado a estar en Facebook, y tenemos que adaptarnos a sus políticas.