Un estudio realizado en aproximadamente 50 mil casos de pacientes con Covid 19 demuestra que aquellos que realizan ejercicio de manera regular, tienen muchas menos posibilidades de sufrir un cuadro grave que ponga en riesgo su vida.

Otro estudio realizado a cerca de 660 mil adultos, concluyó que aquellos individuos que llevan una vida sedentaria corren un mayor riesgo de morir prematuramente; aquellos que se ejercitan poco, disminuyen su riesgo de muerte prematura en un 20 por ciento; aquellos que practican 30 minutos de ejercicio diariamente, lo reducen en un 31 por ciento; por último, aquellos que se ejercitan aproximadamente 65 minutos diarios, logran abatir el riesgo en un 39 por ciento.

¿Qué es más valioso que nuestra vida? Con ello en mente, resulta fundamental tomar conciencia de que debemos tratar con mucha mayor cortesía y cuidado a nuestro cuerpo, ejercitándolo y además, cuidando las substancias que le dotamos.

Las cifras son escalofriantes: cerca del 58 por ciento de los mayores de 18 años en nuestro país llevan una vida sedentaria, es decir, no realizan una actividad física de manera frecuente. Las consecuencias directas de ello son la obesidad y las enfermedades crónico degenerativas que tienen a nuestra población y a las instituciones de salud frente a un reto que luce invencible.

Sin embargo, en este reto como en muchos otros, las acciones individuales sumadas provocan grandes cambios y soluciones efectivas a los más profundos problemas.

Iniciar resulta complicado pero nunca imposible. El reto es incluir en tu agenda, al menos unos cuantos minutos diarios de actividad física. En un principio, lo único que tendrás que invertir es tiempo y las ganancias y los beneficios que recibirás a cambio resultan invaluables.

Por ello te invito a comenzar: toma una hoja de papel y ubica un tiempo muerto en tu agenda; estoy seguro que no será un proceso complicado si revisamos nuestras actividades a detalle. Posteriormente, ubica una actividad que se ajuste a los espacios que existen en nuestra comunidad. El encierro provocado por la pandemia nos enseñó que cientos de personas corrieron maratones completos dando vueltas alrededor de la pequeña estancia de sus departamentos, lo que quiere decir que cualquier espacio es valioso para hacer deporte.

Invertir en tu salud es la acción más valiosa que podrías realizar. Las ganancias son enormes y con ello además de beneficiarte tú se beneficiarán quienes te rodean. Necesitarás algo de voluntad y constancia, ingredientes que en muy poco tiempo, te harán sentir una vida nueva que te impedirá dejar de ejercitarte. Anímate a comenzar, no te arrepentirás.