• El 15 por ciento de las MiPyMEs en México aseguró que vendió menos en diciembre de 2019 que en ese periodo de 2018

• Solo tres de cada 10 pequeñas empresas del país creen que la cuasi-recesión económica no afecta sus negocios

• Para la segunda parte del estudio, UENI solo entrevistó al 10 por ciento de las organizaciones del censo original

Las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyMEs) son frecuentemente pintadas como el gran motor que mueve a las economías. Lo anterior también es cierto en México. No solo los expertos se esfuerzan por lograr que estos negocios puedan incrementar sus ventas en puntos claves del año. Además, incluso plataformas de escala internacional están dispuestas a apoyar su crecimiento. Pero lo anterior no significa que todavía haya retos muy importantes a superar.

Por supuesto, los desafíos que deben superar las MiPyMEs son distintos según el experto al que se consulte. De acuerdo con Your Planning Partners, el dinero y la falta de colaboradores preparados son dolores de cabeza comunes. Real Business señala que los canales digitales, que dejan a las marcas vender donde sea, aumentaron la competencia. Según Fast Company, las barreras legislativas que ponen los gobiernos a veces son muy altas para ciertos negocios.

En el caso específico de México, hay un reto adicional. Ya hace varios días que, de acuerdo con El Universal, se confirmó el casi nulo crecimiento de la economía nacional en 2019. Para 2020, las perspectivas tampoco son muy positivas. Esta cuasi-recesión del país tiene a más de un negocio tenso sobre los resultados de sus compañías. Y en el caso de las MiPyMEs, todas las afectaciones serían todavía mayores. No hace falta ver más allá de las ventas decembrinas.

Recesión al final sí impacto las ventas de MiPyMEs

A finales de diciembre, justo antes de la gran temporada de ventas de Navidad, Año Nuevo y Día de Reyes, la organización UENI realizó una encuesta entre las MiPyMEs de México. En este censo, se les preguntó a estos negocios sobre sus perspectivas de ingresos para esta temporada. La mayoría de las empresas, 86 por ciento, dijeron que su negocio debería rendir mejor que en 2018. Asimismo, más de la mitad dijo no estar preocupada por la recesión.

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Una vez pasada esta temporada de ventas, UENI repitió el experimento. Y en un comunicado, dio a conocer que la perspectiva no fue tan positiva como la esperada. Menos de la mitad de hecho logro tener más ingresos que en 2018. Más importante aún, las perspectivas sobre la cuasi-recesión económica en México fueron mucho peores. Ahora, Un 68.7 por ciento dijo que sí noto que la baja actividad comercial del país tuvo un impacto en los resultados de la marca.

¿Qué se puede hacer ante esta perspectiva?

No es la primera vez que se tiene una perspectiva negativa sobre la economía. Ya desde 2017 se percibía un bajo nivel de crecimiento anual. Ante esto, a mediados de 2019 varios expertos sugerían que tanto MiPyMEs como la clase media serían la fuerza de la reactivación de la nación. La guerra comercial, aunque abrió nuevas puertas de inversión, también redujo la participación de Estados Unidos (EEUU). Y los precios de muchos productos siguen al alza.

Hay que mirar a profundidad los últimos resultados de UENI. En términos generales, las ventas de diciembre no fueron tan negativas. De hecho, fue solo el 31 por ciento de las MiPyMEs las que de hecho dijeron que sus negocios registraron un peor rendimiento que el año pasado. El resto o se quedó igual o superó el nivel del año previo. Por supuesto, las expectativas no se cumplieron del todo. Sin embargo, es mucho mejor crecer poco o quedarse igual a perder.

Las empresas de México, incluyendo las MiPyMEs, deben empezar a prepararse para el nuevo status quo. Es claro que la situación económica de todo el país está a punto de entrar en una fase particularmente compleja, sin solución en el corto plazo. Esto no significa que no deben dejar de intentar y apuntar por resultados geniales. Tampoco implica que se deben enfocar solo a sobrevivir. Pero sí que deben de ajustar su visión de crecimiento al contexto nacional.