Entender la segmentación de mercado es fundamental en mercadotecnia, dividir un grupo en otros pequeños e internamente homogéneos, permite crear mensajes a la medida del público objetivo. De ahí la tendencia de hablar de los millennials, un término referente a la generación nacida a principios de los años 80 a 2000.
Sin embargo, para identificar a un millennial no basta con calcular su edad a simple vista e incluso de verificarla, sino que este grupo posee características específicas que son relevantes para las marcas porque se estima que en los próximos diez años la generación va a representar el 74 por ciento de la población económicamente activa, de acuerdo con datos de la consultora Deloitte.
Mientras el vicepresidente de Publicidad e Imagen Corporativa de Televisa, Mauricio Carrandi, vincula la opinión de los televidentes con un fenómeno en el que “la mente tiende a cerrarse, Sócrates le decía metonimia, los psicólogos le dicen Gestalt”.
En este sentido, la revista Time les atribuye el narcisismo en un artículo titulado “Millennials: The me, me, me generation”, pero tal vez su descripción más atinada se centre en que los coloca como perezosos, un punto visible precisamente en redes sociales, con una mezcla de activismo social, crítica desmedida y egocentrismo, dentro de las publicaciones.
La también llamada Generación Y se hace notar con sus opiniones cuando se tocan temas como el caso del rebranding del canal 2 de Televisa, pues es de los grupos con mayor interés en compartir su opinión sobre el cambio de imagen del ahora llamado canal Las Estrellas; según determinó el Departamento de Investigación de Merca2.0, en el estudio “Sondeo de Imagen del cambio del canal 2”, en un universo de 490 personas.
Una de las características que distingue a este segmento es el uso constante de la tecnología, por ello las redes sociales están colmadas con sus críticas. Así, cuando la televisora compartió la nueva imagen del canal más visto en la televisión mexicana, de acuerdo con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), se leyeron todo tipo de publicaciones, negativas y positivas.
El estudio determinó que 52 por ciento de los televidentes mexicanos que vio la transmisión del canal 2 ya con las modificaciones en imagen y programación, cree que se trata de un cambio de forma y no de fondo.
Y es que las opiniones de los millennials se centraron en el logotipo, destacando el parecido de sus colores con los de la televisora rival, TV Azteca.
El directivo de Televisa explicó que el cambio se concentra en eliminar la palabra canal porque remite a una televisora lineal, justo lo que quieren eliminar y crecer a una plataforma de producción y distribución de contenidos, y sobre todo, que en la imagen se mantiene el distintivo de una estrella y que los colores aluden a la armonía.
Sin embargo, los tonos remiten a las barras de color o mira rainbow , la señal de video usada en la producción de televisión para la comprobación del estado de los sistemas de producción, que generan, tratan y transmiten la señal de TV, y que como su nombre lo dice, están ubicados en el orden natural del arco iris.
El antiguo sistema National Television System Committee, usado en América y parte de Asia, implementado en 1940 para resolver los conflictos que surgieron entre las empresas sobre la introducción de un sistema nacional de televisión analógico, culminó su función precisamente con el apagón analógico, que en México se concretó el jueves 31 de diciembre de 2015.
Y no es la primera televisora que se basa en ello, la National Broadcasting Company (NBC), fundada en 1926, usa desde su creación un logotipo que atañe a dicha colorimetría.
De hecho, TV Azteca usa los colores de su logotipo por una alianza comercial con la compañía estadounidense, que presuponía la compra de 10 a 20 por ciento de la televisora. Así, en1994 se dio color al logo del águila que hasta entonces era blanco y negro, tomando cinco de los seis colores del logotipo de NBC, pero en orden inverso: verde, azul, morado, rojo y amarillo, con las palabras “Televisión Azteca” en tipografía Times New Roman en negro, sobre fondo blanco.
Es así que la teoría de los millennials, en efecto, sería acertada en señalar la relación entre el logotipo de Las Estrellas y el de TV Azteca, pero como no relacionan el fenómeno con la televisión analógica porque nacieron durante su decadencia y la imagen no está unida con su entorno cercano, dejan de lado información que no le es inmediata y no buscan más allá, un claro indicador de que en la pereza de buscar bases les impide saber por qué tendrían la razón.