El marketing digital ya no debería ser parte descontextualizada del presupuesto de marketing de las empresas. Hoy tenemos que pensar que YouTube o la plataforma de videos de Facebook, es tanto o más potente que una tanda de comerciales en el cable en un horario de reparto. Dependiendo de los segmentos y de los objetivos, los resultados pueden llegar a ser mucho más rápidos, económicos y significativos que la planificación de medios tradicional.

Pero bien, dentro de las redes sociales, Facebook es el canal prácticamente más tradicional junto a Google. Si bien los que dominan el tema son más bien jóvenes, existe una percepción equivocada del éxito de una acción de una marca en redes sociales. Los clientes, por alguna u otra razón están obsesionados por los likes, y es tarea nuestra, de los expertos, enseñarles que poco o nada importa el like, luego de la introducción del nuevo algoritmo de Facebook, el Edge Rank. Este algoritmo filtra tus publicaciones y hace que solo las más atractivas lleguen a la base de datos completa que tienes de tus seguidores en fanpage. De esta forma el número de seguidores que tiene tu cuenta no es más que una estadística estática y muy poco relevante.

Las estadísticas que realmente importan son 2:

El alcance: ¿Mil likes que llegan a un millón de personas o un millón de likes que llegan a mil personas? Aunque suene extraño, estas dos formas pueden darse y claramente significarán el opuesto de una horrorosa administración a una gestión descomunal. Es cierto, con muy poca gente puedes hacer que tus publicaciones lleguen a una gran cantidad de personas y tu visibilidad sea gigantesca. O bien puedes tener un”Ferrari” con un millón de fans, donde tus publicaciones no las vea absolutamente nadie. Como ejemplos sólo basta revisar a las grandes marcas, cómo viven diariamente esta realidad.  Es por ello, que debes preocuparte del alcance (estadística que te arroja Facebook, cuando eres administrador) y olvídate del like.

La interacción: Esta también es muy relevante, pues significa cuando involucrados están tus seguidores contigo. Cuánto te comentan, cuánto te comparten, cuánto les gusta tus publicaciones.

Un parámetro mínimo es que al menos el 10% de tu base de datos de seguidores esté interactuando contigo. Es decir, un fanpage de 100 mil personas, lo mínimo que se le puede pedir si está bien administrado, es que tenga un engagement de 10 mil personas (durante la última semana).

Ya lo sabes, olvídate del like y piensa en efectividad. Interacción y alcance son los indicadores que te revelarán si realmente eres un maestro de las redes sociales o solo un principiante que acumula personas dormidas en una base de datos estática.