• GM adquirirá el 11 por ciento de las acciones de Nikola, lo que representa una operación valuada en dos mil mdd

• Se espera que el primer vehículo eléctrico de la startup automotriz, el Badger, llegue al mercado a finales de 2022

• Hasta ahora, esta pequeña tecnológica ha desarrollado tres vehículos, dos de ellos pensados para el mercado masivo en Europa y Estados Unidos

La tecnología de los autos eléctricos es una de las que más expectativas genera en el mundo, en gran parte por que hay un interés cada vez más claro del público en estos vehículos. Dentro de este mercado, la líder histórica ha sido la gigante Tesla, del sudafricano Elon Musk. Pero los rivales más fuertes de esta tecnológica lentamente se están poniendo a la par de la compañía. Y no hay ejemplo más claro de cómo se ha cerrado esta brecha que la nueva compra de GM.

De acuerdo con The Verge, la gigante automotriz acaba de adquirir una parte de Nikola, una startup especializada en pickups eléctricas. Como parte de este acuerdo, GM no solo podrá nominar a un nuevo miembro al consejo presidencial de la tecnológica. Según Reuters, le va a ayudar a producir su primer vehículo, la camioneta Badger, con ayuda de su amplia cadena de producción. Se espera que el trato le genere ingresos por cuatro mil millones de dólares (mdd).

La noticia contribuyó a elevar las acciones de Nikola, ya valuada desde su salida a la bolsa en decenas de miles de mdd, en un 30 por ciento. Por su lado, los títulos de GM se dispararon un seis por ciento a raíz de este anuncio. Se espera que el rol de General Motors sea dar a su nueva socia las baterías de hidrógeno que necesita para sus vehículos. Paralelamente, según Reuters, las acciones de Tesla se cayeron en un 15 por ciento tras quedar fuera del S&P 500.

¿Acaba de poner GM en jaque a Elon Musk?

Hay que destacar que estas dos automotrices no son las únicas que están invirtiendo de forma muy significativa en vehículos eléctricos. Hyundai decidió presentar la línea IONIQ hace un par de semanas, una marca dedicada a esta tecnología. También Sony tiene la evidente capacidad de producir estos autos. Volkswagen, por su lado, está invirtiendo mucho para llevar el nuevo sistema a las masas, mientras que en China están surgiendo rivales muy poderosos y hábiles.

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Vale la pena analizar la adquisición de GM. No solo es poético que la automotriz esté aliada con una startup que toma su nombre de la misma figura histórica que inspiró a la marca de Elon Musk. También ocurre en un momento en el que muchas de las predicciones sobre la sobre-valuación de Tesla parecen estar dando frutos. No cabe duda que se trata de un riesgo adicional para el magnate sudafricano. Pero, ¿basta para quitarle el liderazgo en el sector?

Tal vez. La operación de GM en Nikola solamente le dará control sobre el 11 por ciento de la startup automotriz. Más importante todavía, la compañía mantendrá su independencia y no se espera que lance su primer camioneta eléctrica sino hasta 2022. Es evidente que la inversión no va a dar frutos de forma inmediata. Pero General Motors bien podría estar sembrando las semillas de su éxito en un par de años, si se esfuerza y Tesla continua su espiral descendente.

Sobre el mercado de los autos eléctricos

Más allá de estos casos de éxito en Tesla y GM, vale la pena mencionar que el desarrollo de este tipo de vehículos parece más una serie de altibajos que múltiples triunfos contundentes. La misma General Motors tuvo que trasladar a los ingenieros de Corvette a su unidad de autos eléctricos para reforzar su estrategia. Porsche ha advertido que los altos costos de producción aún no dejan márgenes de ganancia atractivos. Y el costo de ser un líder es demasiado alto.

¿Por qué hay tantas marcas que insisten en fortalecerse en una industria que realmente no es muy viable hoy en día? Se puede explicar la misión de GM, Tesla y otros en las predicciones a futuro. De acuerdo con la IEA, aunque la pandemia de COVID-19 hará más lento el mercado, Wood McKenszie aún espera un crecimiento exponencial del mercado al menos hasta 2040. De hecho, estudios creen que para 2032, un tercio de los autos de pasajeros serán eléctricos.