Los planes de comunicación integran ahora las nuevas tecnologías a las herramientas tradicionales de Relaciones Públicas, para fortalecer los vínculos de una empresa o institución con sus públicos.
Con ello mejoran su efectividad. Las nuevas tecnologías como los blogs y las redes sociales, entre otras, aparecieron para revolucionar las comunicaciones.
Brindan nuevas posibilidades para que las empresas puedan contactarse con sus públicos de interés, mantener diálogos y crear una cultura de compartir, enriqueciéndose y fortaleciendo esos vínculos.
Estas innovaciones tecnológicas iniciaron la era de la conversación. Las Relaciones Públicas basadas en la conversación, apoyadas por las nuevas tecnologías se denominan Relaciones Públicas 2.0.
Esta nueva forma de interactuar con las audiencias considera a un público que surgió con la web, los internautas.
Internauta es un neologismo resultante de la combinación de los términos Internet y del griego ναύτης (nautes, navegante), utilizado normalmente para describir a los usuarios habituales de Internet y/o de las redes.
En esencia, este término denomina a una persona que navega con cierta frecuencia en Internet, visitando páginas web y en algún sentido internalizando sus contenidos. Por extensión, se llama así a cualquier persona que haciendo uso de una aplicación en una computadora obtiene información de Internet, y/o interactúa con otras personas a través de correos electrónicos, y/o compartiendo archivos, y/o participando de discusiones en foros o en redes sociales, etc.
Una manera efectiva para comunicarse y persuadir a los internautas es a través de los influenciadores, personas que generan información de productos, servicios o de cualquier tema de actualidad. Regularmente se especializan o hablan de un tema o categoría en específico y, por lo general, tienden a interactuar y a participar con otros usuarios compartiendo sus opiniones, pensamientos, ideas o reflexiones.
Según estudios recientes, 8 de cada 10 internautas afirman preferir las recomendaciones de usuarios particulares antes que los mensajes puramente promocionales de muchos personajes populares. Va en decadencia la era de los testimoniales de figuras públicas y este papel lo están tomando los influenciadores.
Las estadísticas muestran que las celebridades -quienes tienen mayor alcance por ser figuras públicas- tienen cada vez menos influencia. En orden decreciente en alcance le siguen los periodistas, los fans y los influenciadores de nicho. Paradójicamente, éstos últimos son quienes tienen mayor grado de credibilidad y por lo tanto de influencia sobre los internautas.
Un programa efectivo de vinculación con internautas debe considerar, sin lugar a dudas, el acercarse a ellos por medio de influenciadores, pero resulta clave la correcta selección de los mismos, considerando las dos grandes variables, alcance y grado de influencia sobre nuestro target.