En su Ad Quality Year in Review 2018, Microsoft reveló una cifra importante. A través de Bing, consiguió bloquear cinco millones de anuncios maliciosos sobre criptomonedas. Estos mensajes comerciales tenían como objetivo llamar la atención de los usuarios y llevarlos a sitios no-seguros. Ahí, las personas podrían haber sido vulnerables a numerosas modalidades de fraude.
No es raro que las criptomonedas sean un recurso favorito de los estafadores en línea. De acuerdo con la agencia australiana ScamWatch, los esquemas de inversión son los que generan mayores pérdidas para la población. Además, Bitcoin.com estima que las estafas de cualquier tipo que involucran a las divisas digitales son muy beneficiosas. Tanto las que usan anuncios en línea como otras plataformas, generan ingresos ilegales por nueve millones de dólares diarios.
Para los administradores de publicidad digital, los anuncios maliciosos son un elemento que debería causar preocupación. De acuerdo con Statista, el número de fraudes por estos elementos ha ido incrementando lentamente con el transcurso de los años. Para finales de 2018, en estimaciones del Better Business Bureau (BBB), se alcanzaron más de 48 mil incidencias solo en Estados Unidos. En lo que va de 2019, ya acumularon unas 8 mil 634 denuncias.
La inversión en el problema de los anuncios maliciosos
Bing bloqueó mucho más que publicidad engañosa para criptomonedas. En total, los sistemas automáticos de Microsoft suspendieron 200 mil cuentas de su plataforma de Ads. Asimismo, se eliminaron 900 millones de campañas y 300 mil sitios sospechosos. La compañía también remarcó que, si un operador humano se tomara un segundo para detectar y eliminar estos anuncios manualmente, habría invertido 30 años de su vida con conseguir los mismos resultados.
Este dato refleja una realidad importante. Las compañías están invirtiendo demasiado dinero en evitar que los usuarios de sus plataformas sufran de fraudes. Sin embargo, como apunta el BBB en su sitio de investigación, la mayor parte de estos anuncios utilizan ingeniería social. Microsoft y otros proveedores están destinando importantes presupuestos a eliminar un problema que, realmente, solo puede solucionarse a través de una mejor educación de la población general.
¿De quién es la responsabilidad de eliminar los anuncios maliciosos?
Incluso si la educación personal es la mejor manera de evitar fraudes personales, los usuarios aún confían en que las compañías se encarguen de los anuncios maliciosos. Según Experian, cuatro de cada cinco clientes esperan que su integridad sea prioridad para las compañías. A la vez, solo entre el 42 y 30 por ciento de los clientes perciben las medidas de protección como impedimento a su experiencia.
Lo cierto es que también las organizaciones tienen un incentivo económico para luchar contra los anuncios y otros recursos maliciosos. El reporte de Experian señala que los usuarios abandonan un sitio si creen que no garantiza su integridad. Además, dos terceras partes de las compañías apuntan que es más costoso que un cliente sufra de una acción fraudulenta no detectada a que se bloquee una acción legítima.