• Una Xbox Series S o Series X, respectivamente, tendrá un costo de 299 y 499 dólares si se paga de contado

• Pero con el plan de financiamiento de Microsoft, su precio incrementaría a 600 y 840 dólares, después de 24 pagos de 25 y 35 dólares

• Sin embargo, considerando que el costo mensual del Game Ultimate Pass, incluido en este plan, es de 15 dólares, su precio sería de 240 y 480 dólares

A pesar que el sector consolas es relativamente menor, al menos comparado con el segmento de móviles, la lucha entre Microsoft y Sony por la próxima generación aún genera furor. En los últimos meses, los altibajos de ambas compañías y sus dispositivos se han vuelto cada vez más radicales, sin que se termine de definir un ganador claro por mucho tiempo. Pero en los últimos días, la ventaja está a favor de la Xbox Series X. Y la brecha solo se hace más grande.

De acuerdo con TechCrunch, Microsoft acaba de lanzar un plan de financiación para la nueva consola de siguiente generación. La idea es que la gente pueda comprar una Xbox Series X, o u hermana más pequeña la Series S, no por el precio completo, sino en un formato de “renta hasta que la compres”. En Estados Unidos (EEUU), se espera que el modelo más potente de la consola cueste 35 dólares al mes. El servicio incluiría una suscripción a Game Pass Ultimate.

En el caso de la Xbox Series S, el plan de renta será de unos 25 dólares al mes, también con acceso al servicio de suscripción de cloud gaming. En ambos planes, Microsoft hará el cargo recurrente por dos años, hasta que los usuarios sean los dueños completos de la consola. Es incierto si este plan llegará a mercados fuera de EEUU. Sin embargo, considerando que este aparato tiene un precio mayor en México y otros países, es probable que también este plan.

Publican oficialmente los precios de la nueva xbox en algunos países y miren al lado de quien estamos situados pic.twitter.com/WmRbrTncUN

— Lew (@FakundooGuerra) September 9, 2020

Esa xbox no se va a pagar sola… pic.twitter.com/eCcGGjZ5Ok

— Mosley ???? (@imosleey) September 9, 2020

Una oferta de Xbox que será difícil, casi imposible, de igualar

La cuestión del precio es tal vez la principal ventaja que la consola de Microsoft tiene sobre la PS5 de Sony. No solo no se ha revelado oficialmente cuánto va a costar la rival de Xbox. Ya en abril se teorizaba que podría ser igual de costosa que un iPhone SE, con un valor de hasta 550 dólares. Aún cuando se estimaba que podría llegar a tener un tag de unos 10 mil pesos, ya era muy por encima de lo que se cobra a los usuarios de este sistema por la actual generación.

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Es cierto que a lo largo de la guerra de las consolas, la PS5 ha logrado crear más expectativa que Xbox. Su evento de lanzamiento fue una muestra de poderío, que solo se vio reforzada por problemas de producción del lado de Microsoft. Específicamente, el retraso de Halo Infinite a 2021, muy tarde para impulsar las ventas de la consola. Sin embargo, con este agresivo plan de precios, la que está en problemas es Sony. Y es que hay otros factores a tomar en cuenta.

Principalmente, el hecho que Xbox, según The Verge, convenció a EA de sumar su plan de suscripción como un beneficio gratuito adicional a su Game Pass Ultimate. Cierto, la PS5 ha sido siempre la consola que tiene más y mejores franquicias de calidad. Pero Microsoft se está convirtiendo, objetivamente, en el mejor trato del mercado. A menores precios y mayor librería de contenidos, no hay mucho espacio para que Sony se mantenga como la líder indiscutible.

Una técnica que resuena a la perfección con el consumidor actual

Xbox no es la única en una misión por abrumar a sus rivales con una estrategia de bajo costo y mayor valor. Netflix desde hace meses que está experimentando con una suscripción más barata en India y otros países de la región, en un impulso por ganar suscriptores. También en México se han empezado a lanzar planes de telefonía baratos desde varias compañías. Hasta Didi Food se alió con varias compañías para crear menús especiales mucho más económicos.

Tiene perfecto sentido que Xbox y estas otras marcas estén tratando de apelar por precios más bajos. No solo siempre ha sido una buena estrategia, sino que es especialmente muy bien recibida en medio de una crisis económica. Capgemini reconoce este factor como parte de una fórmula más compleja. Deloitte asegura que es una consecuencia natural de optimizar los negocios post-COVID. Y Atlas apunta que es la única oportunidad para ciertos sectores clave.