Durante el primer semestre de 2017, Michelin tuvo ingresos mayores a los 5 mil 500 millones de dólares, lo que representó un incremento del 10 por ciento, respecto al mismo periodo de 2016. En esta ocasión, la compañía quiso subirse a la tendencia de los autos autónomos y presentó el “neumático del futuro”.

La compañía dio a conocer su nuevo proyecto de neumático para vehículos de auto-conducción, el cual consistiría en esponjas de impresión 3D en forma cruzada, de araña, de colores fosforescentes, que serían imprimibles con materiales biodegradables, como caucho natural, papel, latas, madera, residuos eléctricos, plásticos, metales usados, telas e incluso desechos de naranja.

Según Michelin, el diseño futurista es parte de los trabajos de investigación y avance de la compañía, no obstante, “aún no tienen dominada la técnica de cómo realmente los fabricarían”, aunque para 2020 tendrían listos las primeras impresiones.. Y es que los neumáticos serían “todo terreno”, adaptables para todos los caminos y para los climas más adversos.

De acuerdo con el vicepresidente ejecutivo de investigación de Michelin, Terry Gettys, el neumático futurista de Michelin se trata de una solución a largo plazo para compañías que fabriquen autos autónomos y eléctricos como Tesla, y reemplazaría por completo a las llantas tradicionales.

Si bien el concepto de neumáticos sin aire surgió hace 10 años, actualmente lo tienen solo vehículos pequeños y de baja velocidad, como carros de golf o cortadoras de césped, no obstante, imprimirlo en un tamaño mayor requeriría más investigación debido a la mega estructura que necesitarían los materiales biodegradables, ya que hoy en día, más del 70 por ciento de los neumáticos en el mundo están fabricados con materiales no biodegradables.